Sección patrocinada por sección patrocinada

Lírica

Los Premios Ópera XXI cogen vuelo

Los galardones líricos se han entregado en Palma con los pájaros como estrellas invitadas y con nombres como los del Teatro la Zarzuela, Gustavo Gimeno, Calixto Bieito, Ausrine Stundyte e Ismael Jordi de protagonistas

La soprano lituana Ausrine Stundyte (en el centro) interpreta a Renata en el Teatro Real
La soprano lituana Ausrine Stundyte fue premiada por su papel en "El ángel de fuego"Javier del RealJavier del Real

Había prometido “diversión y entretenimiento” la directora artística Marta Pazos, consciente de la tendencia a las largas veladas en las que suelen convertirse las galas de entrega de premios, y lo consiguió, la gala fue ágil, variada, musical y divertida. Ópera XXI es una asociación que reúne a los 25 teatros y temporadas líricas más importantes de España y anoche entregaba por quinta vez unos galardones que, a pesar de su juventud, son ya una referencia de la ópera y la zarzuela en nuestro país.

La gala tuvo lugar en el Teatre Principal de Palma, conducida por el actor Ángel Ruiz y las sopranos Mariola Cantarero y María Hinojosa, con ellos, las intenciones se vislumbraron pronto, nada más alzarse el telón, apareció el coro del teatro y la urraca ladrona, “la gazza ladra” de Rossini –Hinojosa–, que al final del número roba uno de los trofeos. Luego apareció el Papageno, uno de los personajes de “La flauta mágica”, de Mozart, en realidad, el presentador Ángel Ruiz vestido de chaqué blanco y la típica jaula de mochila a la espalda.

Estaba claro que el tema de la noche iba de pájaros, “un homenaje a los tantísimos compositores que a lo largo de la historia de la ópera han intentado emular con la voz el canto de las aves, ese canto de libertad”. La ópera –explicó el Papageno– es nuestro Netflix cantado”.

Y entre los muchos “papagenos sueltos”, comenzó por el primer galardonado de la noche, el Premio Joven Cantante para el barítono Carles Pachón, por su prestación en este mismo rol en "La flauta mágica", que agradeció en un video. Mariola vestida de Tippi Hedren en “Los pájaros” de Hitchcok y con pájaros volando por encima de su cabeza, canta una romanza de la “Tabernera del puerto”, que da paso a la mejor Cantante Femenina para la soprano Ausrine Stundyte, por su impresionante papel en "El ángel de fuego" de Prokófiev en el Teatro Real y el masculino para el tenor Ismael Jordi por un triplete de papeles: "Los Gavilanes", en el Teatro de la Zarzuela; "Doña Francisquita", en el Palau de les Arts de Valencia; y "Manon", en el Teatro Villamarta de Jerez.

Fue cuando llegó el momento de presentar a la consorte, la Papagena, –Hinojosa– con vestido negro y tocado arquitectónico, mientras empezaba el instrumental de una habanera. La parte institucional vino por parte de la presidenta de Ópera XXI, Isamay Benavente, directora del Villamarta. “Nuestro objetivo es seguir consolidando la visibilidad y la imprescindible aportación de la ópera a la sociedad española, a su papel como bien esencial y reivindicar el papel de la cultura en nuestras vidas”. Y prosiguió: “En la ópera queremos trabajar desde la colaboración, no desde la competencia y premiamos lo celebrado y lo vivido el año pasado”. Tuvo también un recordatorio para los que nos han dejado hace poco, como Luis de Pablos, Teresa Berganza o Pedro Lavirgen, entre otros.

Tras la interpretación de “Los pájaros perdidos”, de Piazzolla se entregaron el galardón Trayectoria profesional al compositor y director de orquesta Miguel Ángel Gómez-Martínez y el honorífico a la Institución Cultural, que recayó en el Teatro de la Zarzuela, con Daniel Bianco a la cabeza que lo dejará pronto. El premio a la Mejor Iniciativa de Fomento y Difusión de la Lírica fue para la iniciativa de "Les Arts Volant", un proyecto de difusión cultural del Palau de les Arts de València. Por otro lado, el mecenazgo también fue premiado y el galardón fue para Fundación Castell de Peralada, que fue entregado el barítono Carlos Álvarez.

La tercera parte comenzó con el Papageno volando de nuevo por el escenario vestido de "cowboy" con smoking blanco y guantes con plumas, preparándose para cantar “Gavilán o paloma”, de Pablo Abraira, como si estuviera en un piano bar, con el coro con antifaces blancos, imitando a la concurrencia. El premio a la mejor iniciativa de repertorio lírico español, Intérprete, Dirección o Producción ha sido para el Festival Teatro Lírico Español que se desarrolla en el Teatro Campoamor de Oviedo. Las presentadoras, con piano y tocados de cisne blanco, se cantan la una a la otra frases sueltas de diversas óperas que tienen como nexo el tema de los pájaros... parece una batalla entre las dos, pero finalmente sus voces se unen imitando los dos violines de la primavera de Vivaldi.

El premio a la mejor Nueva Producción Latinoamericana, galardón que se entrega en colaboración con OLA (Ópera Latinoamérica), fue para la ópera "Patagonia", del compositor chileno Sebastián Errázuriz, presentada en estreno mundial.

Y por fin, Papageno y Papagena recuperan el galardón robado. El Premio a la Mejor Nueva Producción se lo llevó la coproducción del Villamarta y el Cervantes de Málaga de la ópera "Diálogos de Carmelitas", de Poulenc. La mejor dirección musical y de escena fue para Gustavo Gimeno y Calixto Bieito, respectivamente, ambos por "El ángel de fuego" del Real.

Y con esto, el vuelo de los pájaros había terminado. Eso sí, con la orquesta tocando “La gazza ladra”.