Demanda

La Corte Constitucional colombiana estudia hoy la ley que prohibe las corridas en el país

El alto tribunal analizará una demanda que alega vulneración del derecho a la cultura y a la libertad artística

Imagen de archivo de la Plaza de Toros la Santamaría en Bogotá (Colombia)
Imagen de archivo de la Plaza de Toros la Santamaría en Bogotá (Colombia)larazon

LaCorte Constitucional de Colombia tiene este miércoles sobre la mesa un debate decisivo: la revisión de la Ley 2138 de 2024, conocida como “No Más Olé”. La norma, aprobada por el Congreso hace poco más de un año, establece la prohibición progresiva de las corridas de toros en el país. Sin embargo, sectores taurinos interpusieron varias demandas alegando que la medida desconoce el carácter cultural y artístico del toreo, y con ello vulnera derechos fundamentales, que es inconstitucional y que se han cometido vicios de trámite en el debido proceso, entre otras cosas.

Las demandas, más de doce, han sido admitidas a trámite y una de ellas se discute hoy como el séptimo punto del orden del día, aunque no se espera que haya una decisión inmediata. Lo que sí está claro es que el pronunciamiento marcará un precedente de enorme alcance, no solo para la tauromaquia, sino también para el reconocimiento de otras prácticas culturales que enfrentan cuestionamientos desde distintos sectores sociales.

Los defensores de la ley, encabezados por la senadora Esmeralda Hernández, insisten en que la norma es plenamente constitucional. Aseguran que responde a un cambio en la sensibilidad de la ciudadanía y a la necesidad de avanzar hacia un modelo de bienestar animal. “Jamás podrá llamársele justamente cultura a la tortura”, afirmó la congresista en recientes declaraciones.

Desde el lado taurino, la argumentación es distinta. Para ellos, la tauromaquia no puede reducirse a una polémica sobre sufrimiento animal, pues se trata de una expresión cultural con raíces profundas, que involucra arte, identidad y libertad creativa. En este sentido, cuestionan que el Estado pretenda imponer una visión única, desconociendo la pluralidad cultural que la Constitución promete proteger.

Los demandantes consideran que el alto tribunal debe actuar con equilibrio y recordar que la Carta Política reconoce la cultura como un derecho. Prohibir la tauromaquia, sostienen, sería abrir la puerta a que otras manifestaciones artísticas también puedan ser eliminadas con argumentos morales o coyunturales, dejando en riesgo la diversidad cultural del país.

El fallo, cuando llegue, será definitivo: la Corte deberá decidir si la tauromaquia continúa siendo una práctica permitida bajo el amparo de la Constitución, o si queda definitivamente proscrita por la Ley “No Más Olé”. La expectativa en los círculos taurinos es alta, pues se trata de un momento crucial para la defensa del toreo como expresión cultural en Colombia.