Feria de Fallas

Manzanares y Rufo, trofeos a Jandillas que no merecieron el vientazo

El clima condicionó el juego de los toros en la octava del abono fallero

GRAFCVA2266. VALENCIA, 18/03/2023.- El diestro, Tomás Rufo, da un pase a su primer astado durante la corrida de toros de la Feria de Fallas, con toros de Jandilla/Vegahermosa, en la que ha compartido cartel con Manzanares y El Juli. EFE/Juan Carlos Cárdenas
Corrida de toros de la Feria de Fallas, con toros de Jandilla/Vegahermosa para El Juli, Manzanares y Tomás RufoJuan Carlos CárdenasAgencia EFE

Para El Juli no debía ser un paseíllo más. Hacía tan solo 24 horas que lo había hecho en la plaza de toros de Castellón, aquí al lado, donde salió a hombros. Uno de los toros que lidió fue de su amigo Daniel Ruiz. Lo que nadie podía imaginar es que el camino de vuelta que hizo el ganadero hacia el campo, con su hijo y el mayoral, sería el último. Un infarto acabó de manera irremediable con su vida. Algo cambia para siempre cuando un amigo se te va. De esas cicatrices uno va sabiendo con el tiempo. Hoy toreaba en Fallas. Con Manzanares, con el que también coincidió ayer, que a su vez hacía doblete en el abono fallero, celebrando que este año le van los 20 de alternativa. Estas cuentas ya no nos benefician a nadie. Lo curioso es que ambos, El Juli en la plaza francesa de Nimes en 1998, y Josemari en Alicante en 2003, tomaron la alternativa con toros de Daniel Ruiz. Múltiples coincidencias de la vida. Caprichos que encadenan círculos mágicos. Juli hizo el paseo con el crespón negro y un capote de paseo de luto. Imponía en el minuto de silencio. Abría plaza en tarde ventosa. Ver a Juli brindar al cielo el toro era reflejo de la puta vida. Hacía apenas unas horas el destinatario de aquel brindis estaba en la misma plaza que Julián, en el callejón tal vez o en un tendido. Cuántas cosas de pronto se quedan interrumpidas o en el tintero. Julián no pasó después un buen rato con ese Jandilla al que le faltaba entrega y tampoco por el viento que hacía más complicado tener seguridad en el envite. No se alargó. Se ajustó con un cuarto de pocas revoluciones.

De viento a vendaval pasó la cosa cuando Manzanares salió con el segundo. Fue buen toro, que no lució lo que era por las circunstancias. Quiso Josemari y a pesar de los altibajos que tuvo la labor por esos desafíos dejó momentos buenos, de torero centrado y con ganas de celebrar a gusto. El toro tuvo mucho bueno. Un cañón con la espada. El quinto acudió al engaño

con ese punto de Jandilla de exigir siempre, de querer las cosas por abajo. Por el zurdo fue bueno, viajó hasta el final con mucha profundidad, pero Manzanares tardó tiempo en ponerse por ahí y optó por darle una tanda, la de cortesía, y seguir por el diestro por donde ya llevaba un rato de trabajo. La faena le exigió, pero no logró mayores. En esta ocasión cantidad y calidad no fueron de la mano. Y cantidad hubo.

Encastado fue el tercero, que tomó el engaño muy por abajo. Qué pena el viento porque ensució mucho la faena de Tomás Rufo, que fue un sí pero no hasta bien avanzada la faena y entonces en tablas, y de uno en uno, alargó la labor hasta escuchar un aviso. Fueron los mejores pasajes antes de una estocada. Y la oreja. Lo bordó de nuevo la cuadrilla de Rufo y él en el toreo de rodillas. Después se le fue la cosa en más preparación que contenido a un toro con el fuelle justo pero buena clase. Sin más.

Ficha del festejo

Valencia. Octava de la Feria de Fallas. Se lidiaron toros de Jandilla, correctos de presentación. El 1º, sin entrega; 2º, buen toro, con calidad y repetición; 3º, encastado y con repetición; 4º, noble y a menos; 5º, encastado y de buena condición; 6º, noble y sin fuelle Lleno.

El Juli, de grosella y oro, estocada (silencio); pinchazo, estocada trasera, aviso (saludos).

José María Manzanares, de berenjena y oro, estocada (oreja); aviso, ocho pinchazos pinchazos, segundo aviso, estocada (silencio).

Tomás Rufo, de tabaco y oro, aviso, estocada (oreja); tres pinchazos, estocada (ovación).