El viento y la lluvia marcaron un San Isidro de récord

No se había cumplido un día después del final del ciclo y la empresa, Plaza1, sacó pecho por el primer gran éxito de la feria más importante del mundo taurino: la taquilla. Según sus propios datos, por los tendidos de Las Ventas pasaron un total de 482.177 espectadores. Es decir, casi 21.000 asistentes en promedio cada tarde, para una media del 91% del aforo del histórico recinto. El año pasado, esa media se ubicó en el 80%.

Cierto es que el nivel artístico no fue lo esperado por empresa y aficionados, pero también es verdad que la molesta presencia del viento y la lluvia condicionaron muchísimo el desempeño de toros y toreros en el principal ruedo mundial.

Aún así, durante el ciclo se cortaron un total de veinte orejas, catorce de ellas por matadores de toros y las otras seis por rejoneadores. Entre los toreros de a pie, tanto numéricamente, como en las buenas sensaciones que dejó entre los aficionados, el gran triunfador fue el Sebastián Castella. El francés, que volvía a esta plaza después de haberse retirado de la actividad en 2020, es el diestro que más orejas ha cortado en la plaza de Madrid en el siglo XXI donde ha alcanzado su sexta puerta grande. Fue el 19 de mayo, cuando desorejó a “Rociero” de Jandilla. Días más tarde, el 1 de junio, obtuvo otro trofeo más de un toro de El Torero, mientras que el que completó su lote le propinó una grave cornada de la que se recupera en este momento.

Con dos trofeos y sendas puertas grandes aparecen Emilio de Justo y Fernando Adrián. El extremeño las alcanzó en la primera de sus tres tardes firmadas, ante una corrida de Garcigrande, mientras que el madrileño logró el mayor éxito de su carrera en la única oportunidad que tuvo en la feria, con una brava y exigente corrida de Santiago Domecq, la mejor del ciclo junto a las de Victorino Martín y, un pequeño escalón por debajo, Juan Pedro Domecq y José Escolar.

También destacaron por sus sólidas actuaciones premiadas con el corte de una oreja toreros como Uceda Leal, Paco Ureña, Román, Ginés Marín, Tomás Rufo, Gómez del Pilar y Leo Valadez, el único de los cuatro diestros mexicanos que actuaron en la feria que obtuvo premio. En total, hasta treinta y dos matadores se dieron cita esta isidrada en Madrid, en la que se le concedió la alternativa a Álvaro Alarcón. Otros nombres para recordar son los de Fernando Robleño, que dio dos vueltas al ruedo con los toros de Adolfo Martín, y los de Daniel Luque, Adrián de Torres, Francisco José Espada, Álvaro Lorenzo y Francisco de Manuel. Mientras que a diestros como Morante de la Puebla, Roca Rey, José María Manzanares, El Juli, Alejandro Talavante y Miguel Ángel Perera se les escapó la feria sin un éxito qué llevarse en su esportón. También se recordará a López Chaves, por ser su último paseíllo en esta plaza como matador de toros.

Un recuerdo más amargo guardará Ángel Téllez, Francisco José Espada, José Garrido, Álvaro Lorenzo, Sebastián Castella, Paco Ureña, los novilleros Mario Navas, Jorge Molina, Sergio Rodríguez, el rejoneador Duarte Fernandes y el banderillero Rubén Sánchez, quienes tuvieron que pasar por la camilla del doctor Máximo García Padrós.

A caballo debemos destacar el paso de Diego Ventura, un jinete de récord, pues ha alcanzado su décimo octava salida a hombros de Las Ventas y sumó un total de tres orejas en sus dos actuaciones. Léa Vicens y Guillermo Hermoso de Mendoza, fueron los otros dos rejoneadores en obtener trofeos, con una oreja cada uno.

El aspecto ganadero también ha sido destacado, por el importante número de toros que embistieron en la feria, siendo premiados con vuelta al ruedo "Valentón", de Garcigrande; "Cartelero", de José Escolar, y "Contento", de Santiago Domecq. Aunque hay otros nombres como los de "Director", "Teatrero", "Rebujín", "Rociero", "Camillero", "Montecillo" y "Zapatazo", que llevaron la emoción a los tendidos por su bravura.