Rafael Nadal

Así ve el capitán de la Copa Davis a Rafa Nadal

Sergi Bruguera analiza el equipo que competirá en la Caja Mágica por la sexta Ensaladera para el tenis español

Cena oficial de cara a la fase final de la Copa Davis
El equipo español, en la cena de gala antes del arranque de la competiciónJ.J. GuillénEFE

Muy pocos capitanes de la Copa Davis han encontrado un respaldo de los jugadores como el que recibió Sergi Bruguera (16-1-1971, Barcelona) con su nombramiento hace algo más de dos años. El bicampeón de Roland Garros (1993 y 1994) está expectante ante el nuevo formato de la Davis. «De mi etapa de jugador dudo mucho que me hubiera seleccionado para este torneo. Lo de la superficie...», asegura. Bruguera no es muy amigo de exponerse mediáticamente. «Aquí las estrellas son los jugadores. Con quien hay que hablar es con ellos», dice a la conclusión de un entrenamiento.. Entre sesión y sesión en la Caja Mágica, con Gerard Piqué merodeando en las instalaciones más nervioso que los miembros de su equipo, Bruguera hace un hueco para conversar con LA RAZÓN a tres días para que arranque la nueva Davis.

–¿Cómo ha encontrado la pista? Ya sabe aquella historia de la altitud de Madrid, el bote de la bola la pista rápida...

–La pista la hemos encontrado bastante bien. No es demasiado rápida, en realidad es menos de lo que nos esperábamos. Se puede jugar bien desde el fondo de la pista y eso nos va bien para los jugadores que tenemos en el equipo, pero la superficie es un hándicap. En tierra es donde somos los mejores con diferencia. Si jugáramos en tierra a nivel del mar te diría que somos favoritos número uno seguro, pero... Está el tema de la altura que se nota mucho y que el doble gana mucha importancia. Es mucho más decisivo que cuando las eliminatorias eran a cinco puntos. Pero que tenemos posibilidades de competir y opciones de llegar lejos, claro que sí. España tiene un equipo muy potente, que sería mejor en tierra, seguro, pero que nadie dude que vamos a estar a la altura.

–Con ese hándicap al que se refiere, ¿sería mejor afrontar el torneo sin ser locales por aquello de quitar un poco de presión?

–Creo que no. Sé que están todas las entradas vendidas para el martes y para el miércoles, y eso quiere decir que la gente tiene muchas ganas de vernos competir. Y eso es bueno, muy bueno. Como siempre en Madrid, el público va a ser un tercer jugador que nos apoyará muchísimo y estoy convencido que nos ayudará a sacar algún punto adelante. El público puede ser decisivo. Pero la gente tiene que saber que aquí apenas hay margen de error. Antes en casa éramos súperfavoritos, no nos ganaba nadie y ahora eso no es así.

–Gerard Piqué ha confesado que le invade cierto nerviosismo en los días previos al arranque... ¿hay esa sensación en el equipo?

–Esos nervios de Piqué no tienen nada que ver con los que pueda tener el equipo. Son nervios a nivel de negocio, a nivel empresarial. Nosotros estamos a lo nuestro y todos los jugadores del equipo tienen experiencia suficiente para afrontar la Copa Davis sin nervios.

–¿Nadal –la entrevista se realizó antes del tercer partido de Rafa en las ATP Finals– parece llegar en el mejor estado de forma posible de las últimas semanas?

–Que Rafa va a venir con mucha confianza es seguro. Se está viendo en Londres que está para competir con cualquiera en pista rápida. Lo mejor de Rafa es que además de poder ganar sus partidos infunde un nivel de confianza en el resto del equipo muy importante. El equipo ve en Rafa a un amigo que tiene constantes ganas de mejorar, de seguir aprendiendo y eso viniendo del número uno del mundo es algo increíble.

–Con 33 años, ¿cuánto tenis le queda a Rafa?

–Eso depende de su estado físico porque el hambre, las ganas, la ilusión y la ambición las va a tener siempre. Mientras siga con la ambición que tiene yo creo que vamos a tener Nadal para varios años más. Hay que tener muy claro que tener a Nadal en el equipo, jugando para España con 33 años es un lujo increíble. Es un jugador con un nivel brutal. No he visto nada así en mi vida. Si además tiene la implicación que tiene para ayudar a todos, para que todo vaya bien, para que sea uno más del grupo... Siempre me ha comentado que una de sus grandes ilusiones ahora es volver a ganar la Copa Davis. Y que si las lesiones le respetaban iba a formar parte del equipo. Y aquí está. Es una suerte enorme tener a Rafa.

–¿Cuál es la mejor virtud del equipo al margen de la presencia de Rafa?

–España tiene jugadores de un nivel muy potente, pero lo importante no es eso. Lo importante de verdad es que todo el mundo está implicado y hay un compañerismo que no sé si tendrán otros. Si tienes jugadores de nivel y están todos implicados es cuando la cosa funciona. El equipo es muy potente, tiene armas para ganar la Davis, pero de ahí a ganarla o a ser los principales favoritos hay un camino largo.

–¿Quiénes son los favoritos?

–Con Croacia y Rusia –la entrevista se realizó antes de conocer la baja de Medvedev– vamos a sufrir en la primera fase seguro. Francia es un enorme competidor y luego está Serbia con Djokovic. Hay varios países capaces de llevarse la Ensaladera.

–¿Qué cree que va a ser lo mejor y lo peor del nuevo sistema de competición?

–Lo bueno es que en una semana la gente va a ver aquí a casi todos los mejores jugadores del mundo. Falta alguno, sí, pero están casi todos. El jugar varios días seguidos –primera fase será martes y miércoles y a partir del viernes se disputan los cuartos– va a hacer una competición muy emocionante, muy intensa. El formato es muy potente. Lo único que cambiaría quizá serían las fechas. Lo ideal sería después del Abierto de Estados Unidos.

–¿Qué balance hace de sus dos años al frente del equipo?

–Ha habido momentos buenos y otros no tan buenos. La semifinal en Lille del año pasado fue un momento complicado. Sobre todo por cómo perdió Pablo Carreño aquel primer partido. Estábamos con mucha ilusión y todo se torció demasiado pronto. La eliminatoria anterior a ésa, en Valencia y ante Alemania, tuvo un momento muy especial con la victoria de David Ferrer en el quinto partido. Esos momentos hicieron grande la Copa Davis y esperemos que se vivan partidos así aquí.