Guerra en la Afe por el convenio del fútbol femenino

La junta directiva de la Asociación de Futbolistas españoles (Afe) está dividida después de la firma del convenio colectivo del fútbol femenino. De “vergonzosa firma” califican el acuerdo el vicepresidente del sindicato, Jesule, y varios directivos más. “El presidente de AFE y sus máximos responsables, no han defendido ni han garantizado los derechos laborales de las futbolistas tras dieciocho meses de negociación”, añaden.

Las diferencias se han hecho públicas en un comunicado firmado por el propio Jesule, compañero de Rubiales en el Levante y también en su etapa de presidente de la Afe, y tres vocales de la junta directiva, Xavi Oliva, Queco Piña y Armando Lozano

Los firmantes aseguran que la Afe ha firmado "un convenio con objetivos distintos y alejados de los que son realmente sus funciones: velar por los derechos laborales de las futbolistas españolas” y acusan a su presidente, David Aganzo, de estar “de parte de la patronal”.

Denuncian también que no han sido informados de las negociaciones. “Como miembros de la Junta Directiva, queremos denunciar que no hemos tenido conocimiento del contenido de las negociaciones del citado Convenio, pese a mostrar un incesante interés. Tampoco han tenido conocimiento los miembros del Comité de Fútbol Femenino, que no han sido invitados a la presentación del Convenio en el Congreso de los Diputados. Ésta es la línea de absoluta opacidad mantenida por David Aganzo durante su presidencia", aseguran.

Estos directivos del sindicato de futbolistas entienden que el convenio genera “desigualdades e injusticias” y resumen su malestar en cuatro puntos:

1- Las jugadoras de Segunda División -Reto Iberdrola- quedan fuera de este Convenio Colectivo Femenino. Y es que en el transcurso de las negociaciones no se han puesto sobre la mesa los derechos de las mismas.

2.- AFE y la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino firmaron un preacuerdo que no podían cumplir. En esa tesitura, pidieron amparo a la Real Federación Española de Fútbol para que aportase una solución al problema que ellos mismos habían generado. La solución aportada por la RFEF, ha sido rechazada por ambas partes pese a ser mucho más beneficioso para las jugadoras, con el consiguiente perjuicio ocasionado a las futbolistas.

3- AFE también ha aceptado, en este nuevo Convenio, un salario mínimo de 12.000 euros anuales (el 70% del salario mínimo), cuando en las anteriores negociaciones se garantizaban 20.000 euros anuales por jugadora.

4- Tampoco se explican cómo AFE ha aceptado que se puedan hacer contratos inferiores a 12 meses y sin dedicación del cien por cien, lo que dejará a las jugadoras por debajo del sueldo mínimo interprofesional anual.