Opinión

LaLiga Santander
El japonés Takashi Inui logró para el Eibar uno de los goles más absurdos de la temporada. En el minuto 28 del partido contra el Valladolid, Fede San Emeterio quiso ceder a su portero, José Antonio Caro, pero el resbalón de este provocó que la pelota llegara a Inui que, a puerta vacía, solo tuvo que empujar el balón para marcar.
Tan escandaloso fue el error de San Emeterio y Caro que Inui no celebró el que en ese momento era el segundo tanto de su equipo.
Eibar y Valladolid ya tenían asegurada la permanencia antes de empezar el encuentro, que terminó con victoria para el equipo vasco por 3-1.
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