La mejor atracción de Disney World es Luka Doncic

Triples chutando desde el centro de la pista, triples golpeando el techo del pabellón y con un bote antes de entrar, malabares con los pies y el balón de baloncesto como si fuera un futbolista, bromas con los compañeros, risas después de fallar un mate solo... si en Disney World hay alguien pasándoselo a lo grande ese es Luka Doncic. Todo está en las redes sociales antes de que la NBA se reanudara. Lo más grande es que con el regreso de la competición, el esloveno es el jugador más en forma de la Liga. Los números no engañan. En los cinco partidos que ha disputado supera el triple-doble de promedio: 33,4 puntos, 11,6 rebotes y 11,6 asistencias.

“Que injusto es que no esté entre los tres candidatos al MVP”, tuiteó su ex compañero Felipe Reyes después de conocerse que Doncic no está entre los candidatos al premio individual más prestigioso. La Liga anunció a LeBron James, James Harden y Giannis Antetokounmpo como candidatos. La “excusa” es que sólo se incluyen los partidos hasta el parón de mediados de marzo. El balcánico respondió con una exhibición ante los Suns y otra con victoria incluida ante el mejor equipo de la Liga, los Bucks. Doncic ha mejorado en todo esta temporada. Anota, rebotea y pasa mejor. También ha aumentado sus porcentajes de tiro. Supera a LeBron en anotación (29,1-25,4), rebotea más que Harden y LeBron (9,5-6,4-8) y asiste más que Harden y Anteto (8,9-7,5-5,7). Sin MVP, el consuelo que le ha quedado es la nominación a Jugador con Mayor Progresión de la temporada.

En Estados Unidos, ex jugadores que ejercen de comentaristas se han rendido a su talento. Paul Pierce, estrella de los Celtics, asegura: “Es el jugador más talentoso de la Liga por delante de Harden, LeBron y Stephen Curry”. Kendrick Perkins, pívot “leñador”: “Con 20 años hay que relacionarle con Magic o con LeBron”. Nunca nadie tan joven -21 años- lideró la NBA en triples-dobles una temporada. Suma 17 y el que logró ante los Kings le situó, con 21 años y 158 días, como el más joven en la historia de la competición en establecer un triple-doble con más de 30 puntos y 20 rebotes. El de los Bucks (36/14/19) le vincula a jugadores de otra era como Oscar Robertson, Wilt Chamberlain o Michael Jordan.

Rivales, técnicos, compañeros, su entrenador... los halagos se multiplican. “Luka sabe dónde está todo el mundo, tanto en ataque como en defensa; eso es una señal de un tío increíblemente sabio”, asegura su entrenador Rick Carlisle. Él también fue jugador: “Jugué con Larry Bird, he tenido el privilegio de entrenar a Jason Kidd y Luka es un jugador de ese tipo, alguien que lo ve todo en la cancha. Además ofrece espectáculo y es alguien a quien pagarías por ver”. Antetokounmpo: “Es increíble, un jugador excepcional que hace mejores a sus compañeros. Tiene muchísimo talento”.

Anteto da otra de las claves: la capacidad de hacer crecer al grupo. En su segunda temporada en la NBA y después de más de cuatro meses de parón, Doncic está liderando a un equipo que tres temporadas después va a volver a disputar los playoffs. Es el tercer mejor ataque de la Liga sólo por detrás de Bucks y Rockets. La defensa es muy mejorable, cierto, pero nadie quiere cruzarse con un equipo que ahora es séptimo en el Oeste, pero que aspira a la quinta plaza. Todo con tal de no cruzarse en los playoffs con Los Angeles Clippers. Precisamente ante los Clippers, Doncic vivió su partido más “flojo” en Disney: 29 puntos, 3 rebotes y 6 asistencias. Ese día, el técnico “clipper”, Doc Rivers, reveló una de las claves de la victoria (126-111): “Se necesita todo el equipo para defenderle”.

Las últimas victorias han ayudado a disimular uno de los defectos de los Mavericks: los números en el denominado «clutch time», los cinco minutos finales de los partidos cuando la diferencia es de cinco puntos o menos. Habían perdido diez de los doce partidos resueltos por tres puntos o menos, habían perdido cuatro de las cinco última prórrogas y todo su talento ofensivo se diluía en los minutos finales. Doncic también se veía afectado por ese problema. El balcánico llevaba hasta el partido ante los Kings un 0/10 en lanzamientos para empatar o ganar el partido en el último minuto o en la prórroga. Esto también ha cambiado. «Trabaja duro, quiere ser quien controle la pelota y va a ser el centro de atención de todo el mundo», avisa Carlisle, En Disney ya lo es.