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La Real Sociedad tiene un arma secreta para ganar en la Liga: el euskera

Su técnico, Imanol Alguacil, ha confirmado que da instrucciones a algunos futbolistas en esta lengua para que el rival no conozca sus planes, ahora que con los estadios vacíos se escucha todo

El entrenador de la Real Sociedad, Imanol Alguacil, este martes durante un entrenamiento en las instalaciones de Zubieta, en San Sebastián
El entrenador de la Real Sociedad, Imanol Alguacil, este martes durante un entrenamiento en las instalaciones de Zubieta, en San SebastiánGorka EstradaEFE

En plena polémica sobre el tratamiento del castellano en la nueva ley de educación, la Real Sociedad ha confirmado que tiene un arma secreta para ganar partidos en la Liga Santander: el euskera.

Resulta que Imanol Alguacil y sus futbolistas se comunican en esta lengua durante los encuentros “a propósito”, para que los rivales no se enteren de las instrucciones del técnico, ahora que se escucha todo en los estadios vaciados por la pandemia de la covid-19.

Así lo ha explicado este viernes Alguacil, en una rueda de prensa celebrada íntegramente en lengua vasca, con motivo del inicio de la campaña social Euskaraldia, que pretende extender el uso del euskera en todos los ámbitos de la sociedad.

Preguntado por el uso del euskera en el equipo, Alguacil ha admitido que el hecho de que muchos jugadores y técnicos conozcan esta lengua se ha convertido en una “ventaja”, de la que participan otros futbolistas llegados de fuera que “poco a poco van cogiendo algunas palabras”.

El entrenador guipuzcoano ha admitido, en tono distendido, que algunas veces el banquillo utiliza el euskera “a propósito” para que los rivales no conozcan sus planes.

“Es una herramienta más para que el contrario no sepa lo que queremos hacer”, sobre todo ahora, cuando “se oye todo” al no haber público en las gradas.

Precisamente Alguacil ha protagonizado un vídeo elaborado para la campaña Euskaraldia, en el que mantiene una conversación en euskera en su despacho con el guardameta mallorquín Miguel Ángel Moya, quien ha mostrado en muchas ocasiones desde que llegó a San Sebastián su interés por conocer y utilizar la lengua vasca.