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La charla secreta de Zidane para motivar al Real Madrid antes del Chelsea

El Chiringuito reveló las últimas y emocionantes directrices del entrenador francés antes del duelo decisivo

La charla de Zidane antes del Chelsea-Real Madrid
La charla de Zidane antes del Chelsea-Real MadridAFP7 vía Europa PressAFP7 vía Europa Press

La lista de los futbolistas que más han disparado a puerta esta temporada durante la Champions League (antes del partido de ayer) puede ser la lista de cualquier premio individual. Messi ha probado 20 veces, Halaand y Neymar, 17; Benzema, 16 y Mbappé, 15. Messi y Neymar están reconocidos como los dos mejores futbolistas del momento, Haaland y Mbappé son los delanteros con más futuro y más caros del mercado. Y luego está Benzema, quizá lejos de la fama que rodea a los otros, pero con cuatro Champions en su palmarés, un reconocimiento unánime en el Real Madrid y con la responsabilidad hoy de ser fundamental para que el equipo de Zidane pase a otra final de la Liga de Campeones.

Necesita un gol en Stamford Bridge, por lo menos, para presentarse en Estambul y superar el empate a uno que logró el Chelsea en la ida. Karim fue la tabla de salvación a la que se aferró el resto del equipo cuando parecía que todo se hundía por la velocidad endiablada de los futbolistas ingleses y la imposibilidad del Real Madrid de dar más de dos pases con sentido. En esas circunstancias, Benzema se inventó un remate al palo y cazó un balón en el área para hacer el tanto en el que funda el Madrid toda su esperanza. Si salió vivo cuando estaba siendo fusilado, si llega con vida a Londres, entonces es que todo es posible todavía en esta Champions.

Por eso la charla de ayer de Zidane en el campo, en el entrenamiento: “Tened el balón. Jugad, jugad y disfrutad con el balón porque es lo que nos ha traído hasta aquí. Siempre el Madrid es y ha sido esto”, les dijo el entrenador francés en el corrillo.

Porque con Zidane en el banquillo todo es posible. En el segundo encuentro de la competición, el equipo estaba eliminado y el entrenador, cerca del despido. Se levantó en los últimos minutos de ese choque y tambaleando llegó al último encuentro de la fase de grupos, en la que acabó primero. Luego, en las eliminatorias contra la Atalanta y el Liverpool fue superior. Sabe sufrir como nadie y sabe que hay momentos clave en los que se ganan o se pierden los cruces. La segunda parte del encuentro de ida contra el Chelsea fue uno de esos momentos: cogió el partido y lo bajó de revoluciones porque sabía que le iba la vida en ello.

La experiencia del Madrid es su principal valor frente a la juventud del Chelsea. El equipo inglés se fue de Valdebebas lamentando su mala puntería y sin fiarse de Werner, su delantero. «A veces los delanteros fallan grandes ocasiones, es parte del juego. No hemos tomado aún ninguna decisión», decía ayer Tuchel acerca de si iba a ser titular. El Real Madrid, por su lado, viajó ayer a Londres confiado en Benzema y en su posible compañero esta noche: Eden Hazard.

Lleva Zidane toda la temporada dando vueltas a los hombres de ataque, sin casi nunca poder contar con todos a la vez por culpa de las lesiones. Pero para el partido en el que está en juego parte del éxito de este curso, llega el Madrid con todos los de arriba disponibles, lo que es un milagro en un año que más que de fútbol ha sido de guerra. Y es ahora cuando el entrenador francés va a mostrar sin remedio de quién se fía de verdad para los días en los que hay que jugársela.

«No sé si jugarán con cuatro defensas o con tres», respondía el entrenador del Chelsea acerca de la incógnita que es descubrir el sistema del Real Madrid en estos últimos tiempos. Si juega con cinco atrás, habrá dos hombres arriba; si lo hace con cuatro, lo probable es que sean tres los hombres de ataque. Benzema ha convivido con todos. A solas con Vinicius, acompañado por Asensio, por ambos y también con la presencia de Rodrygo.

Con el que menos, por las sucesivas lesiones, ha sido con Hazard, con el que, sin embargo, es con el que mejor se comprende. «De su asociación con Karim sabemos que pueden salir cosas buenas», respondía el francés tras el encuentro de LaLiga contra Osasuna. Es como si hablaran el mismo idioma, el del balón: tienen más años que el resto y buscan constantemente el primer toque al compañero cercano para volver a recibir. Vinicius es más rápido, pero su estilo es diferente; Marco Asensio toca más el balón; Rodrygo Goes se parece bastante, aunque juega más en la banda.

Si Hazard y Benzema se encuentran, todo es posible. De eso son conscientes en el Chelsea: «Todo el mundo en este club sólo puede decir cosas buenas sobre Eden», decía ayer Christensen. «Le he visto crecer aquí y le conocemos muy bien», continuó. Conocen al Hazard bueno. El que espera hoy el Real Madrid y que va jugar muy cerca de Benzema, su mejor socio.