Olimpismo

El equipo paralímpico de Afganistán se despide de los Juegos de Tokio

La taekwondista Zakia Khudadadi iba a ser la primera mujer que representase a su país en el evento

Un combatiente talibán monta guardia en un puesto de control, este martes en la ciudad de Kandahar. El mulá Baradar Akhund, jefe de la oficina política de los insurgentes en Catar, se dirige este martes a Afganistán tras declarar el fin de la guerra y la victoria talibán, en lo que supone aparentemente el primer viaje oficial de un líder talibán a Afganistán desde la caída del régimen insurgente en 2001. EFE/STRINGER
Un combatiente talibán monta guardia en un puesto de control, este martes en la ciudad de Kandahar. El mulá Baradar Akhund, jefe de la oficina política de los insurgentes en Catar, se dirige este martes a Afganistán tras declarar el fin de la guerra y la victoria talibán, en lo que supone aparentemente el primer viaje oficial de un líder talibán a Afganistán desde la caída del régimen insurgente en 2001. EFE/STRINGERSTRINGEREFE

El equipo paralímpico de Afganistán no participará en los Juegos de Tokio, que empezarán el próximo día 24, ante la imposibilidad de desplazarse hasta Japón dada la situación inestable en el país tras la toma de poder de los talibanes. “La delegación de Afganistán no está en posición de participar” en los Juegos Paralímpicos de la capital japonesa, aseguró el director ejecutivo de Tokio 2020, Toshiro Muto, en una conferencia de prensa en la que señaló que “la tensa situación” en el país “es la razón de la inviabilidad de acudir” a la competición deportiva.

Afganistán iba a estar representado por dos paratletas en los Juegos de Tokio, el luchador de taekwondo Hossain Rasouli y su compañera Zakia Khudadadi, que iba a convertirse en la primera mujer en representar al país de Oriente Medio en unos Paralímpicos, un hito imposible dadas las circunstancias actuales. “Lamentamos que no puedan venir”, añadió Muto, que dijo que los organizadores de los Juegos esperan que “se encuentren seguros”.

Kabul, la capital afgana, ha caído ante los talibanes, tras su rápido avance por todo el país y la huida del presidente Ashraf Ghani, quienes han declarado la victoria tras 20 años de guerra contra el gobierno instaurando por Estados Unidos y sus aliados. El grupo integrista musulmán ha señalado su intención de formar un nuevo gobierno y establecer relaciones internacionales renovadas. El aeropuerto de Kabul está cerrado a vuelos comerciales y se encuentra en una situación caótica. Hasta allí se han desplazado miles de personas que tratan de huir del país.