Historia

Estos son los deportes que se practicaban en la Edad Media... con permiso de la Iglesia

Con la caída del Imperio Romano de Occidente, el feudalismo reinó sobre la ciudadanía y la actividad física llegó a pasar a un segundo plano por ser mal vista

Con la llegada del radicalismo religioso, muchos deportes llegaron a ser prohibidos y castigados
Con la llegada del radicalismo religioso, muchos deportes llegaron a ser prohibidos y castigadosDreamstime

La práctica física es casi tan antigua como el propio ser humano. Desde principios de nuestros orígenes, nuestros antepasados ya hacían algún tipo de deporte, y fue en la Antigua Grecia cuando se comenzó a ver la práctica deportiva reflejada en competiciones o eventos en los que las personas luchaban para conseguir una victoria, aunque el premio fuera la gloria de ser ganador. Con la llegada de la Edad Media, cambió de dimensión.

El Imperio Romano de Occidente cayó y el feudalismo y el auge de las culturas teocéntricas, en lugar de la cultura clásica, reinó sobre la ciudadanía global. Asimismo, la pasión por el deporte se vio reducida ya que estaría mal vista.

¿Por qué la Iglesia prohibió el deporte?

Las prohibiciones fueron inspiradas por el deseo de que los fieles o clérigos, y en definitiva, la ciudadanía en general, utilizaran su tiempo en cosas “productivas”, es decir, trabajos de utilidad que nada tenían que ver con los juegos.

Tras imponerse el cristianismo en la sociedad europea, los hombres estaban sometidos a la autoridad eclesiástica, que predicaba la necesidad de buscar solamente la necesidad del alma, por lo que se publicaron una gran cantidad de decretos que prohibían los deportes. Prácticamente, se oponían a cualquier actividad que provocase el placer y sirviese para satisfacer el cuerpo, puesto que se consideraba como pecado.

En un primer lugar, quedaba terminantemente prohibida la práctica deportiva tal y como se conocía. Si una persona la incumplía, sufriría múltiples castigos. Y si cualquiera que desobedeciera la orden y moría, si era descubierto que su muerte estaba relacionada con la práctica deportiva, se le negaba la sepulta en tierra santa. Algo muy común, ya que las prohibiciones de la Iglesia llegaron algo tarde y las costumbres estaban muy extendidas.

Los deportes que sí se permitían en la Edad Media

Pero años después, las condenas de la Iglesia pasaron a ser más flexibles y limitadas en tiempo. Aunque los deportes clásicos no se consideraban del todo buenos para las autoridades eclesiásticas, algunas actividades que entraban en la categoría sí estaban bien vistas bajo los ojos de la iglesia, como la caza, la guerra y otros eventos como las juntas de caballeros, unos duelos a caballo con largas lanzas de madera.

La caza era la práctica más popular de la época. Debido a esto, las poblaciones de animales se vieron altamente afectadas, lo que generó la creación de cotos de caza, lugares privados en los que únicamente podían cazar los nobles dueños de las tierras. No era un tema baladí, puesto que si un campesino era encontrado cazando sin permiso, podía ser ejecutado en la horca.

Al mismo tiempo, se cree que los antecesores de los que hoy conocemos, tales como el golf, el tenis o el fútbol, también se practicaban durante esta época e incluso antes, aunque con la llegada del radicalismo religioso, se transformara en algo minoritario.