Automovilismo
Álex Palou defiende el título de la IndyCar con los colores de la bandera española
El piloto barcelonés, en busca de su tercer título, llevará el rojo y el amarillo en su monoplaza y en el mono
Álex Palou, bicampeón de la IndyCar, defenderá su corona con su monoplaza y su mono con los colores de España. Rojo y amarillo, como parte de su alianza con la empresa de logística internacional DHL. Mike Parra, Consejero Delegado de la compañía en Europa y Director de Patrocinios Globales, pondera en Efe la figura del piloto español, que les llevará a competir por las victorias. En esta colaboración las similitudes de la empresa con la bandera española "no pasaron desapercibidas" a la hora de plantearse el acuerdo, a la vez que "influyeron" en un diseño que, en comparación con sus decoraciones anteriores, desde que en 2011 entrasen a la competición de monoplazas más importante de Norteamérica, tiene mayor presencia del rojo. "Las similitudes en los colores entre DHL y la bandera española no pasaron desapercibidas para nosotros. Ciertamente influyeron en nuestro proceso de diseño, pero queríamos presentar una decoración fresca que los aficionados disfrutaran de verdad y, por supuesto, que fuera rápida en la pista", asegura Mike Parra.
La asociación supone también un gran cambio para la compañía de logística, ya que pasa de estar asociada al equipo Andretti Autosport, hasta la pasada temporada como patrocinador principal del piloto francés Romain Grosjean, a otros de los grandes e históricos del campeonato de la IndyCar, como es Chip Ganassi Racing. "Cuando nos pusimos en contacto con Chip Ganassi Racing para explorar una posible relación, a medida que avanzaban las conversaciones, quedó claro que existía un respeto mutuo y una visión de futuro sobre cómo ambas organizaciones podrían trabajar juntas. Nos intrigaba la perspectiva de trabajar con un piloto del calibre de Álex Palou, sobre todo por su público y apoyo internacionales. Queríamos competir al frente del pelotón, y creemos que estamos en una posición fuerte para hacerlo en 2024 y en años posteriores", comenta el directivo sobre cómo fueron los primeros acercamientos.
El cambio de equipo para la empresa, con sede central en Alemania, estuvo impulsado por la figura de Álex Palou, bicampeón (2022 y 2024) en sus cuatro años en la categoría, de la IndyCar. Además, según apunta Mike Parra, influyó también el hecho de que el español sea una de las caras reconocibles de la IndyCar, también en los eventos fuera de Estados Unidos. "Álex lleva una trayectoria extraordinaria, dado que ya ha ganado dos campeonatos a una edad tan temprana. También creemos que su impacto se extiende más allá de la pista. Valoramos su persona, su carácter y su potencial como embajador de DHL a escala mundial", señala.
"En la pista, Alex aporta indiscutiblemente un éxito probado y la mentalidad de un campeón: es una estrella del automovilismo que compite en Norteamérica con un público mundial que le apoya. Estamos encantados de reunir a nuestras audiencias y trabajar conjuntamente, lo que nos permitirá avanzar en nuestros esfuerzos de activación y compromiso tanto externa como internamente, incluso en su país natal, España", añade.
Eso sí, no buscaron su perfil para centrarse en el mercado español, aunque sean conscientes de que la decoración sí supone un buen guiño. "Tenemos una importante presencia de marca en España, y en toda Europa, por lo que esto no forma parte necesariamente de una estrategia de marca específica para España", comenta Mike Parra.
La temporada de IndyCar arranca el domingo en St. Petersburg (Florida) con la primera carrera de un calendario que tiene 18 citas agrupadas en siete meses y que finalizará el 15 de septiembre con Álex Palou defendiendo su título a la vez que lucirá los colores rojo y amarillo de la bandera española.
El curso 2024 arranca con importantes novedades en su calendario y muchísima igualdad y pone sobre la mesa múltiples candidatos al título que defiende un Palou ya centrado en Estados Unidos tras cerrar la puerta a los cantos de sirena de la Fórmula Uno. El piloto español parte como favorito número uno, pero el hecho de que haya muchos más óvalos y que sus circuitos preferidos hayan cambiado de fecha en el calendario, dan opciones a otros como el norteamericano Josef Newgarden, rey de los ovales, o el neozelandés Scott Dixon, cuyo rendimiento con 43 años sigue siendo extraordinario.
Dixon es una gran amenaza para Palou: como compañero de equipo en el Chip Ganassi comparten tecnología y ajustes, pero no conceden ni un centímetro en pista. Ambos pilotos buscan ser campeones: Palou busca su tercera corona y Dixon aspira a la séptima. "Es raro y duro. No puedo ganarle por material o desarrollos porque todo ese trabajo va al equipo. Obviamente es un dolor de cabeza tenerlo en casa, y a su vez una oportunidad única de tener al mayor rival aquí, ver lo que hace, cómo piensa y sacar tanta información de uno de los mejores pilotos que ha habido en la historia de IndyCar", afirmó Palou en una entrevista reciente con Efe.
La gran novedad de la temporada 2024 en la IndyCar es el calendario, con 17 grandes premios puntuables y uno, en marzo, de exhibición en Thermal (California), cuyo único atractivo será el premio económico. Este curso pasa de cuatro carreras ovales a cinco, pero la quinta con mucho peso en la pelea por el campeonato, ya que se acaba con la tradición de cerrar la temporada en Laguna Seca (la visitarán en junio) y se coronará al campeón en Nashville.
Esto potencia las opciones de especialistas y es que cuatro de los cinco circuitos ovales se corren en las seis últimas pruebas. Muchas balas extra para los reyes de estos circuitos y dificultad para el actual campeón, un Palou que tiene claro que volver a reinar pasa por mejorar en estos trazados en los que jamás ganó.
La joya de la corona vuelven a ser las 500 Millas de Indianápolis: el 26 de mayo está anotado en rojo en el calendario ya que triunfar en el gran óvalo adquiere prácticamente el mismo valor que ganar el título.
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