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El Atlético vence al Almería (2-1) en un partido que se le hizo largo

El equipo de Simeone acabó pidiendo la hora contra el colista después de tener dos goles de ventaja a los veinte minutos

10 December 2023, Spain, Madrid: Atletico Madrid players celebrate their side's goal during the Spanish La Liga soccer match between Atletico Madrid and Almeria at Metropolitano stadium. Photo: Alberto Gardin/ZUMA Press Wire/dpaAlberto Gardin/ZUMA Press Wire/d / DPA10/12/2023 ONLY FOR USE IN SPAIN
Spain Premier Division - Atletico Madrid vs AlmeriaDPA vía Europa PressEuropa Press

Se imaginaba el Atlético otro partido cuando el VAR anuló un gol a Griezmann en el comienzo. Había sido tan sencillo llegar hasta la portería y llegaba tan castigado el Almería –último en la clasificación y eliminado de la Copa por el Barbastro– que era imposible imaginar que el Atlético acabaría pidiendo la hora y escuchando algunos pitos de la grada.

Tampoco tardaron en llegar los goles de verdad, los que valían. Antes de llegar a los 25 minutos ya ganaba 2-0 el Atlético con goles de Morata y de Correa. El capitán de la selección española llevaba un mes sin marcar y hasta eso parecía funcionar. Los goles, además, llegaban después de buenas jugadas del Atlético. Morata se fue de Montes antes de encarar a Maximiano y librarse de él con un quiebro para rematar con la izquierda el 1-0. Correa remató en el área pequeña una jugada de Llorente, que llegó hasta la línea de fondo para poner el balón en ventaja al argentino.

Las cosas estaban en su sitio y sólo faltaba el gol de Griezmann en su carrera por alcanzar a Luis Aragonés como máximo goleador histórico del Atleti. Pero ni el francés se acercó más al récord ni el Atlético pudo disfrutar de una jornada tranquila. La hora era traicionera, las 2 de la tarde, y los rojiblancos decidieron adelantar la hora de la siesta. Se marcharon al descanso dominando el partido y al regreso eran otros. Mucho menos activos, mucho menos presionantes. Mucho más vulnerables.

El Atlético, que tiene que afrontar cuatro partidos en trece días, creía que era buen momento el segundo tiempo para descansar. El miércoles tiene partido de Liga de Campeones contra la Lazio y no era cosa de desgastarse en exceso para derrotar a un equipo que aún está buscando su primera victoria en la Liga.

Y el Almería, que ya había avisado en la primera parte con los disparos de Baptistao, estuvo cerca de encontrar el empate. Oblak ya había salvado en la primera mitad un remate del ex jugador del Atlético, que culminó de primeras un contraataque perfectamente conducido por Robertone y por Akieme. Antes ya se había precipitado en un disparo desde fuera del área después de recorrer medio campo al recuperar un balón que le entregó De Paul. Le faltó algo de oxígeno y algún compañero que le ayudara en el acercamiento al área de Oblak.

No estaba preciso el Atlético en las entregas. Lo que hizo De Paul en esa jugada de Baptistao lo repitió después Witsel. Pero siempre estaba Oblak al fondo, preparado para despejar casi todo. El esloveno suele mantener la concentración cuando su equipo se va de los partidos y le toca ejercer de salvador. Pudo hacerlo incluso en el gol del Almería. Oblak despejó el lanzamiento desde el borde del área de Pozo, pero no pudo evitar que Baptistao empujara la pelota que había quedado suelta en el área.

Siempre Baptistao. Aunque jugaba muy solo arriba, era un peligro para la defensa del Atlético. Y en la segunda parte, además, tuvo la compañía de Arribas, que se animó a llegar y a disparar con peligro a la portería de Oblak.

Parecía una etapa superada para el Atlético esa en la que se olvidaba de jugar una de las dos partes. Pero desapareció en la primera parte y algo más del partido de Montjuïc y volvió a marcharse en la segunda mitad ante el Almería. El equipo de Garitano dispuso de quince saques de esquina, aunque no supo aprovechar ninguno. Un asedio que llegó a desesperar a la grada del Metropolitano. Se escucharon pitos en algunos momentos de la segunda mitad y se intensificaron en el final del encuentro, cuando el Almería veía el empate como una posibilidad.

No llegó la igualada y el Atlético respiró aliviado, pensando en que el encuentro lo debía haber resuelto mucho antes. El VAR ya le había avisado en el comienzo con el gol anulado a Griezmann de que nada es tan sencillo como parece.