Salarios

Las rebajas en el Barça también llegan al baloncesto

El Barcelona también pretende disminuir el gasto en salarios del equipo de Jasikevicius

Niko Mirotic, en la pasada final de la Liga Endesa
Niko Mirotic, en la pasada final de la Liga EndesaSERGIO PEREZAgencia EFE

Las últimas semanas de la temporada en la sección de baloncesto del Fútbol Club Barcelona han reforzado la idea de Joan Laporta de que hay que rebajar el gasto en el Palau. La derrota en la semifinal de la Euroliga y en la final de la ACB, ambas ante el Real Madrid, han certificado que las rebajas también tienen que llegar al equipo de Saras Jasikevicius. Al técnico lituano le resta un año de contrato y desde el club azulgrana se pretende que su rebaja de sueldo sirva como ejemplo para el resto de la plantilla.

El Barça de la pasada temporada estaba por encima de los 40 millones de presupuesto. Con esa cantidad, el equipo sólo ganó la Copa del Rey. Su gran referente, Nikola Mirotic, habló directamente de «fracaso». Y es que de esos más de 40 «kilos», 35 estaban destinados a los salarios de la primera plantilla del baloncesto azulgrana. El ala-pívot montenegrino es el jugador mejor pagado de Europa con cuatro millones de euros limpios la pasada temporada. Hay otros dos que están en el «top 10» de salarios de la Euroliga: Calathes y Higgins rozan los dos millones por cabeza.

La intención de rebajar los salarios contrasta con la ambición en el mercado del club azulgrana. El Barça se va a deshacer al menos de Brandon Davies –destino Milán–, Smits
–destino Baskonia o Valencia–, Calathes –varios clubes de Euroliga están interesados en el griego–, Oriola –posible destino Girona–, Exum -buscará equipo en la NBA- y Hayes-Davis. El problema es que esas bajas se van a cubrir con jugadores que no son precisamente baratos.

El pívot checo Jan Vesely se ha desvinculado del Fenerbahçe después de ocho temporadas en Turquía. Con 32 años, Vesely se mueve en un ranking salarial muy similar al de Higgins y Calathes. Oscar da Silva, ala-pívot de 23 años procedente del Alba Berlín, sería el sustituto de Smits. Tomas Satoransky regresará seis años después al Palau después de su estancia en cuatro franquicias de la NBA. El base checo tampoco es un jugador precisamente barato. El objetivo de la rebaja de salarios en el equipo de fútbol es pasar de 560 millones a 400. En el baloncesto, la meta es no superar los 30 millones de euros.