86-91. La aparición de Thompkins

Durante demasiadas jornadas fue habitual ver a Trey Thompkins, el que estaba llamado a ser el gran refuerzo interior del Real Madrid esta temporada, al fondo del banquillo vestido de calle.

Durante demasiadas jornadas fue habitual ver a Trey Thompkins, el que estaba llamado a ser el gran refuerzo interior del Real Madrid esta temporada, al fondo del banquillo vestido de calle. Lesiones y problemas personales contrastaban con su buena adaptación al grupo, pero en los partidos de verdad estuvo desaparecido. En un clásico atípico como el disputado en el Palau, Thompkins vivió su primer gran día como madridista. Fue el mejor de los de Laso, el desatascador de un equipo que sumó una victoria que ayuda a superar el trauma de la eliminatoria ante el Fenerbahçe. El ala-pívot estadounidense anotó 25 puntos, atrapó 7 rebotes y demostró que tiene clase para aburrir. Otra cosa muy diferente es su carácter, su fragilidad atrás, su nula predisposición para pegarse por dentro... Pero talento, todo el que se quiera y más. Y el Barça lo sufrió después de ir dominando por 16 puntos (36-20) en el segundo cuarto.

Remontada

El Real Madrid mostró durante casi medio partido los defectos que le han costado la eliminación europea. La defensa en los dos primeros cuartos fue una broma, encajó 52 puntos. El tiro exterior empezó como se mostró durante toda la serie ante los turcos. Los tres partidos ante el Fenerbahçe se saldaron con un sonrojante 27/91, un 29,6 por ciento, desde la línea de tres. En el Palau empezó anotando sólo uno de los ocho primeros lanzamientos, pero luego los tiradores ajustaron el punto de mira para terminar con un brillante 14/28. Entre Carroll y Thompkins acumularon 8/11. Ellos dos con la inestimable ayuda del «Chacho» fueron los encargados de la remontada del último cuarto. El Madrid, que fue todo el partido por detrás, se disparó con un parcial de 1-17 que dejó al Barça sin capacidad de respuesta. Pese a la victoria, Laso no pudo ser más sincero: «No creo que sea un partido para sacar pecho, porque tenemos muchas cosas que mejorar, como nuestra entrada en el campo y el dominio del rebote».

- El Barça y Krasnodar

El partido vital para el Barça se juega mañana en Krasnodar, a más de 4.000 kilómetros del Palau. Un viaje de cinco horas de avión y otra más en autobús llevaron a los azulgrana a tomarse el clásico sin las obligaciones habituales. Espera el quinto partido con el Lokomotiv, el día decisivo para alcanzar la Final Four de Berlín. Para empezar, Xavi Pascual reservó a Dorsey y Navarro, dos piezas que se antojan claves para el futuro en la Euroliga. En apenas seis minutos, el técnico azulgrana había utilizado a diez jugadores y las rotaciones fueron constantes. El colchón de dos victorias con el Madrid en la Liga Endesa hizo el resto. El Barça incluso terminó contento porque salvó el «basket-average». En el Palacio ganó por siete y en el Palau cayó por cinco. «En 48 horas tenemos nuestra verdadera final, un partido de ser o no ser», confesó Xavi Pascual.

- Histórico Adams

El Laboral Kutxa, el único equipo español que tiene garantizada su presencia entre los cuatro mejores de Europa, ganó en Fuenlabrada. Pero lo mejor no fue la victoria sino el recital de Darius Adams en el primer cuarto. El base baskonista anotó 25 puntos, ¡¡¡sí 25!!!, en el primer cuarto. Sólo dejó cinco para los compañeros. Al descanso sumaba 30 y terminó con 41. En el Fuenlabrada, Popovic respondió con 36.

- Ficha técnica:

86. FC Barcelona Lassa (26+26+19+15): Arroyo (9), Abrines (13), Oleson (11), Doellman (16), Tomic (19) -cinco inicial-, Ribas (-), Lawal (-), Satoransky (7), Vezenkov (2), Samuels (6) y Perperoglou (3).

91. Real Madrid (17+26+20+28): Llull (4), Rudy (11), Maciulis (12), Reyes (3), Ayón (4) -cinco inicial-, Nocioni (3), Doncic (-), Sergio Rodríguez (15), Carroll (12), Lima (2) y Thompkins (25).

Árbitros: Sergio Manuel, Juan Carlos García y Carlos Peruga. Sin eliminados.

Incidencias: Partido correspondiente a la vigésimo novena jornada de la ACB, disputado en el Palau Blaugrana ante 6.627 espectadores.

Efe