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Fútbol

Barça-Slavia: los números que evidencian el mal juego de los de Valverde en la Champions

El equipo español recibe al checo (18:55) con la resaca de la derrota ante el Levante y el recuerdo del nefasto partido en Praga. Necesita ganar y convencer en una competición en la que sobrevive gracias a Ter Stegen

El último entrenamiento del Barcelona antes de recibir al Slavia Praga
El último entrenamiento del Barcelona antes de recibir al Slavia Pragalarazon

Por mucho que se diga que lo único importante es el resultado, la manera de llegar a él también tiene su peso, al menos para el estado anímico. Un tropiezo después de siete victorias seguidas no pasaría de una anécdota si las sensaciones que transmite el equipo son de poderío, de mandar en los encuentros. Un tropiezo en este Barcelona irregular y, como norma, irreconocible después de siete triunfos seguidos, convierte el siguiente duelo en un examen. Y el siguiente duelo de los azulgrana es contra el Slavia (martes, 18:55, Movistar Liga de Campeones). Si el resultado es lo único que importa, ¿por qué en el partido contra los checos en Praga hace dos semanas el ambiente parecía de funeral pese al 1-2? ¿Tiene más puntos el Barcelona de los que merece en esta Liga de Campeones? Respondió Valverde: «Los equipos tienen generalmente los puntos que se merecen. En un partido puede ser, pero al final todos tienen los puntos que deben tener, por mérito o demérito». Una idea la del técnico que seguramente sea cierta a largo plazo, pero en los tres encuentros que el conjunto azulgrana lleva en la Champions la realidad ha sido dura: en Dortmund contra el Borussia tiró una vez a puerta y una fuera por los once remates de los alemanes. Ter Stegen paró un penalti. El resultado fue 0-0. En el Camp Nou ante el Inter de Milán empezó perdiendo y sufrió un calvario en la primera parte, en la que de nuevo lo sostuvo su portero tras detener, sobre todo, un cabezazo de Lautaro Martínez y evitar el 0-2. Después tuvo una buena reacción final para dar la vuelta al resultado: 2-1. Y en Praga fueron tres las intervenciones determinantes del guardameta azulgrana en un choque en el que sufrió ocho tiros a puerta y nueve fuera y en el que terminó encerrado. Claro que también dispuso de ocasiones a la contra, pero no era la idea que tenía el equipo ante ese duelo. Ganó 1-2 y otra vez el mejor fue el «1».

Más allá de Messi, Ter Stegen está siendo la única certeza del Barça en esta Champions. Son trece paradas en tres partidos y hasta él mismo se hartó de ser el héroe y soltó: «Tenemos que hablar». No mucho después ha llegado la derrota contra el Levante en Liga, con tres goles encajados en siete minutos, que ha puesto en alerta a todo el mundo para el partido contra el Slavia. «Aquí hay siempre mucha marejada cuando se pierde, para nosotros está bien porque te obliga a una reacción. Vamos muy obligados. Aquí hay marejada incluso cuando ganas si no has hecho un partido redondo. Solemos reaccionar bien, espero que mañana sea así», reflexionó Valverde, consciente de que tienen que «mejorar» en muchos aspectos. «Hablo en general, del colectivo. Errores individuales siempre habrá, se trata de generar unas pautas para que estos fallos no te penalicen mucho. Somos un equipo que si estamos cerca de la portería rival, acertamos mucho porque tenemos muy buenos jugadores. Hay que llegar arriba en condiciones, pero hay que llegar bien», continuó el entrenador. Lo que llama la atención es que en tres jornadas de la Champions el Barcelona sea sólo al vigesimoprimer equipo en la lista de los que más han lanzado a portería, con 37 remates, por los 72 del Bayern o los 63 del Real Madrid, que son los que más lo han intentado, o los 52 del Manchester City y los 51 de la Juve, por citar equipos de su nivel. De los «grandes» es el más pobre en esa estadística aunque, también es cierto, el Liverpool defensor del título ha probado únicamente un disparo más.

Ni siquiera está el equipo catalán en el podio de los conjuntos que más pases han intentado en esta Champions, superado por el Liverpool, el Leverkusen, el Manchester City y el Bayern Múnich, aunque todos tienen un porcentaje de acierto algo más bajo en la distribución. En esa indefinición se mueve el Barcelona, un equipo que ahora mismo no sabe qué es más allá de que tenga al mejor jugador y a un porterazo. «Todos sabemos que debemos mejorar. No hace falta estar hablando. Sentimos que podemos dar un poco más. Seguramente mañana [por hoy], tendremos una gran respuesta», afirmó Semedo. «Debemos mejorar mucho, pero sin olvidar que en la Champions tenemos un empate y dos victorias», continuó el lateral, retomando el debate de que las victorias no deben nublar la autocrítica.