La pizarra: De vuelta a las andadas

A este Real Madrid le han perdido el respeto, ya no se gana ni con el escudo ni con la historia y para colmo ha llegado el VAR. Solari no se enteró tácticamente. Siempre mandó Mendilibar. El «press» sobre la salida de balón fue la clave. Así de sencillo. Adelantar la defensa para hacer un equipo muy corto. Con la pelota en Courtois comienza la tragedia. ¿A quién se la doy? Si la tiene un defensa, todavía peor. Se hace de noche. Y sólo queda una opción: rifar el balón o asumir unos riesgos como el del segundo gol. El equipo se rompe y la segunda línea no interviene. Comunicarse con Kroos, Modric y Ceballos es una misión imposible. Sufren y se diluyen. Las bandas no ayudan. A Bale se le acabó el crédito y Asensio, enjaulado. Benzema es el único rescatable, lo intenta. Los cambios no aportan nada. Este Madrid está enfermo. Algo falla.