Polémica

La comentada decisión de Djokovic sobre los móviles para sus hijos

El tenista ha reflexionado públicamente acerca de si dar a sus hijos uno móvil para que puedan comunicarse con sus amigos

Djokovic hace como que toca el violín con su raqueta tras vencer a Rune
Djokovic hace como que toca el violín con su raqueta tras vencer a RuneEuropa Press

Novak Djokovicsiempre ha tenido una personalidad muy marcada tanto dentro como fuera de la pista. Eso, que le ha llevado a la cima del tenis mundial, se mantiene también en su vida personal, en la que lleva a cabo actitudes en contra de las corrientes predominantes. Un ejemplo reciente de esta convicción es su decisión de negarles a sus hijos el acceso a teléfonos móviles, una postura que ha generado controversia tanto dentro de su familia como en el público.

Djokovic y su esposa, Jelena han sido firmes en su negativa a que sus hijos tengan móviles, a pesar de las quejas que ellos mismos han expresado al compararse con otros niños y para comunicase con ellos. El móvil es lo que piden los niños como regalo enseguida y muchos padres se lo conceden cuando aún no han cumplido ni los diez años. Pero para Djokovic, este no es un tema negociable.

En sus declaraciones, el serbio ha destacado que, aunque la mayoría de los padres sigan las tendencias de ceder a la presión de la tecnología y proporcionar a sus hijos dispositivos desde temprana edad, él y su esposa se consideran con la razón. “Mis hijos todavía no tienen teléfono móvil y mi mujer y yo estamos peleando con ellos. Ellos se quejan y dicen: 'En el colegio todo el mundo tiene excepto nosotros'. No es una situación fácil, porque es el reflejo de lo que ocurre también en otros niveles", ha dicho en la cadena Blic.

Lo tiene muy claro: "Si todos hacen algo, el rebaño se comporta igual, tienes que seguirlos. Bueno, no siempre tiene que ser así. Ahí es dónde yo creo que nosotros nos diferenciamos de otros, porque somos testarudos y activos",

Esta firmeza no es nueva en la vida de Djokovic. Ya lo vimos en un contexto completamente diferente, como fue el coronavirus. Durante la crisis sanitaria, Djokovic se negó públicamente a vacunarse contra la COVID-19, una decisión que tuvo enormes consecuencias en su carrera. fue deportado de Australia poco antes de competir en el Abierto de Australia, uno de los torneos más importantes del circuito de tenis y un escenario donde Djokovic ha tenido gran éxito a lo largo de los años.

Su negativa a vacunarse no solo le costó la posibilidad de defender su título en Melbourne. Djokovic nunca flaqueó en su decisión de no vacunarse, manteniéndose firme en sus principios, aunque puedan, en este caso, estar profundamente equivocados.