Cristiano lo va a intentar

Hará todo lo posible para jugar frente al City. Valora tratarse con células madre y la decisión final dependerá de sus sensaciones

Existe la posibilidad de que la próxima semana el Real Madrid intente la clasificación para la final de la Liga de Campeones sin el futbolista que en esta edición ha marcado 16 goles (más que nadie), ha dado 4 asistencias, ha recorrido 92,6 kilómetros, ha rematado 57 veces (más que cualquier otro futbolista), ha disparado entre los tres palos en 34 ocasiones, ha forzado 14 faltas y ha jugado 899 minutos. Todo esto pierde el Madrid si la pequeña rotura muscular que Cristiano sufre en el bíceps femoral de la pierna derecha le deja finalmente sin poder estar en el partido de vuelta frente al Manchester City.

Evidentemente, sería más difícil sin la gran estrella, pero el cuerpo técnico está convencido de que el resto puede dar el paso adelante que estuvo a punto de permitirle sacar alguna ventaja el martes en el Etihad Stadium. «Todos rinden un poco más cuando no está», decía Ancelotti, y lo mismo piensa Zidane que, en cualquier caso, suspira porque su futbolista franquicia pueda recuperarse. El portugués estuvo ayer en la Ruber Internacional de Madrid en busca de un segundo diagnóstico, que incluye probar con un tratamiento de células madre que permite, a base de inyectar sangre propia tratada, acelerar la cicatrización de los tejidos dañados. Ronaldo salió sonriente de la clínica y así colgó una foto en Instagram junto a la frase: «Don’t worry, be happy» (no te preocupes, sé feliz). CR7 quiere estar en la vuelta de semifinales frente a los de Pellegrini, pero no se agobia. Lo va a intentar y va a hacer todo lo que esté en su mano para ayudar al equipo. Él lo ve posible y también algunos traumatólogos. Hay una posibilidad de que en siete días la rotura esté mucho mejor y entonces entran en juego las sensaciones del propio interesado. Cristiano es un atleta que necesita su potencia y velocidad para ser clave, así que de él dependería jugar sin estar al ciento por ciento, en función de cómo se sintiera a la hora de acelerar y chutar a puerta.

Está muy claro que el luso no jugará el sábado frente a la Real Sociedad y que todos sus esfuerzos se centran en el 4 de mayo, fecha clave no sólo por jugarse el pase a la final, sino también por todo lo que viene después. Tras esta cita quedarían dos partidos en los que se puede estar decidiendo la Liga y la final del 28 de mayo, para la que, si el Madrid pasa, su estrella tendría cierto margen de recuperación. Más allá en el horizonte aparece la Eurocopa, una cita también importante para Cristiano, ya que con su selección últimamente siempre ha llegado demasiado quemado desde el punto de vista físico para poder rendir como a él le hubiera gustado.

Durante la tarde de ayer, Cristiano Ronaldo volvió a «comunicarse» con los aficionados a través de las redes sociales. Colgó otra fotografía en Instagram de espaldas, sentado en una bicicleta de su gimnasio particular y mostrando los bíceps. ¿Significa que se siente fuerte y confiado en poder estar mientras soltaba músculos dando pedales? Posiblemente. Ronaldo siempre quiere jugar, así que apurará, sin locuras, para marcar el gol decisivo. Si no, será el primer hincha.