Sevilla

El Betis sale victorioso del festival

El jugador francés del Sevilla Clement Lenglet del Sevilla, pelea un balón con el jugador del Betis Sergio León
El jugador francés del Sevilla Clement Lenglet del Sevilla, pelea un balón con el jugador del Betis Sergio Leónlarazon

Se divirtió de lo lindo el famoso espectador de Burgos que se evoca en Sevilla para referirse a la repercusión de sus cosas. Se jugó el derbi sevillano, el primero del curso, y salió un partido loco, soberbio por momentos y riquísimo en emociones en el que, además, rompió el Betis una racha de derrotas lacerante. El análisis contendría muchos más matices, porque sobre el césped del Sánchez Pizjuán se contempló a dos equipos con verdaderos problemas defensivos embarcados en un loco intercambio de golpes. Montella, evidentemente, y también Quique Setién, pese a su soberbio triunfo, tienen mucha tarea por delante. En el mundo taurino, se llama festival al espectáculo organizado bajo reglas menos estrictas, un mero entretenimiento para no iniciados que no convence a los aficionados cabales. Eso sucedió.

Ya se había visto un inicio así en un duelo vecinal en el Sánchez Pizjuán, pero en la otra portería y con otra víctima. Un equipo saca de centro y en veintidós segundos tiene tiempo no sólo de perder el balón, sino de encajar un gol. Fabián quebró a Kjaer en el balcón del área y definió un zurdazo magistral. Medio minuto después del pitido inicial, recomenzaba el choque con 0-1, lo que paradójicamente pareció tetanizar al Betis. Los verdes se encerraron a contrapelo, pues no han sido programados para ello, y concedieron ocasiones sin freno hasta que Ben Yedder empató al cuarto de hora al aprovechar la laxitud defensiva visitantes en una jugada de estrategia.

El esquema se reprodujo en los veinte minutos siguientes, porque los béticos no tardaron nada en volver a ponerse por delante en el marcador gracias a una falta lateral bien sacada por Joaquín pero mal defendida por Kjaer, que perdió la marca de Feddal. El marroquí irrumpió en el área pequeña como un abejorro para fusilar en plancha a Sergio Rico. El central danés del Sevilla, trece millones de vellón, se había comido dos goles de novato en el encuentro que más pasión desata por estos lares. Tuvo suerte de que el destino le brindase la ocasión de resarcirse.

Los béticos, a pesar de su ventaja pertinaz, eran incapaces de dominar el balón, lo que en gran parte se debía al mérito de Banega y Nzonzi, más entonado que sus pares en el centro del campo. Merodeaban los sevillistas con insistencia la parcela de Adán, a quien Feddal salvaba del doblete de Ben Yedder en dos cruces portentosos cuando el ariete se aprestaba a empujar sendos pases de Escudero. Sin embargo, concedió un segundo empate el habitualmente fiable portero al medir mal una salida. Jesús Navas colgó la pelota, la prolongó Vázquez y desguarneció el arco Adán, que se quedó a media salida y sin posibilidad de detener el remate blando de Kjaer.

La nueva igualada noqueó al Betis, que tuvo suerte de que el descanso estuviese tan próximo. Aun así, Nolito pudo adelantar al Sevilla antes del intermedio con un remate que Mandi salvó sobre la línea y Mudo Vázquez cabeceó junto al palo, en posición franca, un centro de Navas, que completaba su mejor partido en la segunda etapa como sevillista para desesperación de un Durmisi incapaz de detectar al duende, bien secundado por el juego sin balón de un Corchia que mejora con mucho a Mercado.

La locura amainó en el comienzo de la segunda parte, excepto por el detalle de que Guardado estampó un chutazo en el poste después de un mal despeje de Lenglet. Llegaba la hora de los cambios y ahí se retrató Montella, que desarmó su ya de por sí débil entramado defensivo con el ingreso de Correa como segundo punta. Invocó el italiano al manicomio con ese cambio, que se hizo carne con dos goles consecutivos del Betis que parecían –parecían solo– sentenciar el pleito. En una acción perfectamente elaborada ‘made in Setién’, el festival de toque se aceleró con un centro medido de Boudebouz a Durmisi que el danés convirtió en el 2-3. Sobre el saque de centro, Tello vio un desmarque de Sergio León, que batió a su tocayo Rico en la salida.

El doble mazazo habría sido definitivo de no haber mediado una nueva mala defensa visitante en la siguiente acción de estrategia. Cada balón colgado sobre el área de Adán es una lotería y esta vez fue Lenglet quien sacó la bolita premiada con un testarazo son marca, comodísimo. A punto estuvo de empatar Nzonzi en la siguiente jugada, con otro remate de cabeza que repelió el travesaño. Habían pasado muchas cosas y aún quedaban veinte minutos, jugados ya con los nervios desatados y las fuerzas físicas muy mermadas.

Eran los locales, hartos de correr detrás del marcador, los que más acusaron la fatiga en este tramo final, en el que evidentemente es más sencillo destruir que crear. Tuvo el acierto el Betis de no atrincherarse, lo que habría resultado suicida vista la escasa fiabilidad de su zaga, y ahí se topó el Sevilla con su propia incapacidad, encarnada en la impotencia de un Muriel transparente en los veinte minutos que le tocó jugar. El colombiano y Kjaer, las dos apuestas más onerosas de Óscar Arias, reflejan el fracaso de la dirección deportiva. En el otro lado, la llegada de Serra Ferrer ha devuelto la cordura. Por eso ha vuelto a haber derbi, y por eso lo ha ganado el Betis, que marcó el quinto, mediante Tello, en la última jugada del encuentro.

Ficha técnica

SEVILLA FC (3): Sergio Rico; Corchia (Sarabia, min 84), Kjaer, Lenglet, Escudero; Nzonzi, Banega, Mudo Vázquez (Correa, min 57); Navas, Nolito (Muriel, min 69) y Ben Yedder.

REAL BETIS (5): Adán; Barragán (Francis, min 16), Mandi, Feddal, Durmisi; Javi García, Guardado, Fabián (Camarasa, min 76); Joaquín (Tello, min 60), Boudebouz y Sergio León.

GOLES: 0-1, min 1: Fabián. 1-1, min 13: Ben Yedder. 1-2, min 21: Feddal. 2-2, min 39: Kjaer. 2-3, min 63: Durmisi. 2-4, min 65: Sergio León. 3-4, min 67: Lenglet. 3-5, min 95: Tello.

ÁRBITRO: Jesús Gil Manzano, extremeño. Amarillas para Banega, Francis, Feddal, Mandi, Escudero, Sergio León, Lenglet y Adán.