El Madrid de Laso, un año más en la final de la Liga Endesa

El Madrid de Laso ya está donde siempre a estas alturas de la temporada. Ocho años con el técnico y ocho finales le contemplan. En el tercer partido de la semifinal ante el Valencia, en el día más exigente de la eliminatoria, el equipo respondió y se impuso por 78-85. Los blancos están a la espera de la resolución de la eliminatoria entre Barça y Zaragoza. Los azulgrana dominan por 2-0. Se avecina clásico.

El Valencia se empeñó en que una temporada sobresaliente, por aquello del título de la Eurocup y el regreso a la Euroliga, no podía terminar con un rosco en la semifinal ante el Madrid. Hubo actitud, defensa y atrevimiento. Lo que se vio en muy pequeñas dosis en los dos primeros partidos. De ahí la salida local, 10-3. El Madrid empezó a rearmarse cuando el quinteto empezó a carburar. Fueron Rudy y Taylor -cuatro triples entre ambos en el primer cuarto- los encargados de alzar la voz. El resto de titulares respondió de inmediato. Superado el ecuador del primer cuarto todo el quinteto ya había anotado y el Madrid había volteado el buen arranque valencianista.

El comienzo de las rotaciones aumentó la intensidad en su zona de los locales. Y la defensa del Madrid perdió consistencia. Thomas se movió a su antojo por dentro y el Valencia supo aprovechar las facilidades. Un parcial de 15-8 devolvió el control a los de Ponsarnau (34-28). Llull tenía uno de esos días en los que no se encuentra y tuvo que regresar Campazzo para volver a poner orden. La bravura del argentino activó a Deck, Ayón y Carroll para devolver la igualdad (38-35) al descanso.

En el tercer cuarto el partido entró en ebullición. El Madrid arrancó con un 2-9 para asumir los mandos y ya no los soltó. Hubo técnicas para Rudy y Doornekamp y el duelo se convirtió en un Dubljevic contra el Madrid. El pívot montenegrino decidió que mejor no pegarse debajo con Tavares. Se apostó en la línea de tres y el bombardeo fue inmisericorde. Sus cuatro triples y 16 puntos sofocaron el incendio que provocaron Campazzo, Rudy y Randolph con la ayuda de Tavares. El Madrid más serio de la eliminatoria se topó con la inspiración del balcánico y todo quedó pendiente del último cuarto (60-63).

La política de Pablo Laso de cambiar drásticamente los quintetos de un cuarto a otro no cambió. Con los referentes del anterior parcial en el banquillo sus sustitutos mantuvieron el nivel y Dubljevic estaba en el banquillo. El Madrid estabilizó las ventajas en torno a los seis puntos hasta el regreso de «Dubi» (67-73 a 5:22). Volvió el pívot, pero el acierto se le había agotado. Con un quinteto diferente al del tercer cuarto, el Madrid se movió con comodidad en el filo. Reyes, Carroll, Llull... Demasiados frentes abiertos para que el Valencia provocara el cuarto partido.

78. Valencia Basket (19+19+22+18): Vives (2), Sastre (9), Doornekamp (7), Layberie (0) y Dubljevic (21) -quinteto titular- Tobey (6), Van Rossom (14), Thomas (11), San Emeterio (1), Abalde (7) y Martínez (0).

85. Real Madrid (20+15+28+22): Campazzo (14), Rudy (16), Taylor (10), Randolph (11) y Tavares (6) -quinteto titular- Causeur (0), Thompkis (0), Llull (4), Deck (5), Ayón (10), Carroll (7) y Reyes (2).

Árbitros: Conde, Cortés y Bultó. Sin eliminados. Técnicas a Doornekamp y Tavares.

Incidencias: 7.809 espectadores en La Fonteta. Tercer partido correspondiente a las semifinales de la Liga Endesa.

Terceros partidos: Valencia Basket, 78-Real Madrid, 85 (0-3) y Tecnyconta Zaragoza-Barcelona Lassa (21:00, Movistar +).