La atleta estadounidense Sha'Carri Richardson, medallista de oro en el relevo 4x100 metros y plata en los 100 metros lisos en los Juegos Olímpicos de París, fue arrestada el pasado domingo en el aeropuerto internacional de Seattle-Tacoma, en Estados Unidos. La detención se produjo después de un supuesto episodio de violencia doméstica que involucró a su pareja sentimental, el también corredor olímpico Christian Coleman.

Según informó The Athletic, Richardson, de 25 años, fue puesta bajo custodia durante casi 19 horas. Los hechos habrían comenzado cuando la pareja discutió acaloradamente en el punto de control de seguridad de la TSA. De acuerdo con el informe policial, un agente presenció cómo la atleta empujó en varias ocasiones a Coleman mientras este intentaba alejarse de la situación.

La policía revisó las imágenes captadas por las cámaras de seguridad del aeropuerto, donde se observa a Richardson sujetando la mochila de Coleman con el brazo izquierdo, retirándosela bruscamente. Posteriormente, se interpuso en su camino, lo que culminó con un empujón que hizo que él impactara contra una pared. También se registró el momento en que aparentemente le arrojó un objeto —posiblemente unos auriculares—.

A pesar de estos hechos, Christian Coleman, quien confirmó a los agentes que mantenía una relación con Richardson desde hacía dos años, optó por no presentar cargos ni considerarse víctima. Como resultado, el caso fue cerrado sin mayores consecuencias judiciales.

Los registros oficiales indican que la velocista fue ingresada en el centro correccional SCORE South en Des Moines (Washington) a las 18:54 horas del domingo y fue liberada al día siguiente, alrededor de las 13:30.

El incidente ocurrió pocos días después de que ambos atletas compitieran en los campeonatos de atletismo de EE UU en Eugene, Oregón. Richardson había regresado a las pistas en mayo tras una larga ausencia y marcó su mejor tiempo del año, 11.07 segundos en la primera ronda de los 100 metros. Aunque se retiró antes de las semifinales, volvió a participar posteriormente en la prueba de los 200 metros.

Con plaza asegurada para el Mundial de Tokio como vigente campeona del mundo de 100 metros, Richardson había declarado tras su participación en Eugene: “Competir de nuevo, sentirme bien físicamente y dar lo mejor de mí es lo que más valoro. Esta carrera me permite prepararme con calma para lo que viene”.

Cabe recordar que la velocista ya había estado en el centro de la polémica en 2021, cuando una prueba antidopaje positiva por consumo de marihuana la dejó fuera de los Juegos de Tokio.

Hasta el momento, ni el representante de la deportista ni USA Track & Field han emitido comentarios sobre lo sucedido.