"Barçagate"

Anticorrupción asume el "caso Negreira"

El fiscal general acuerda la medida al tratarse de "delitos relacionados con la corrupción de especial trascendencia"

La Fiscalía de Barcelona dejará en manos de Anticorrupción el "caso Negreira" -la investigación del pago de 7,3 millones de euros del Barça a José María Enríquez Negreira entre 2001 y 2018 mientras era vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros (CTA), supuestamente buscando un trato de favor en los arbitrajes-.

Así lo ha decidido el fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, en un decreto en el que concluye que la competencia para conocer los hechos que constituyen objeto de las diligencias previas 348/23 del Juzgado de Instrucción número 1 de Barcelona debe pasar a la Fiscalía Especial contra la Corrupción y la Criminalidad Organizada, "al tratarse de delitos relacionados con la corrupción de especial trascendencia".

Según la denuncia de la Fiscalía, los hechos denunciados podrían ser constitutivos de un delito continuado de corrupción en los negocios en el ámbito deportivo, un delito continuado de administración desleal o un delito continuado de apropiación indebida, así como un delito continuado de falsedad en documento mercantil.

Pagos de forma verbal y "confidencial"

A partir de ahora será por tanto esta Fiscalía Anticorrupción la que lidere la instrucción de la causa. Según la denuncia de la Fiscalía, pendiente de admisión a trámite, el Barça contrató a José María Enríquez Negreira entre 2011 y 2018 de forma verbal y "estrictamente confidencial", a través de los expresidentes culés Sandro Rosell y Josep Maria Bartomeu, para que el entonces vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros realizase, "a cambio de dinero", actuaciones tendentes a "favorecer" a la entidad azulgrana "en la toma de decisiones de los árbitros en los partidos que disputase el club, y así en los resultados de las competiciones".

Esa denuncia se dirige contra el propio club como persona jurídica, contra Rosell y Bartomeu y dos exdirectivos culés, Óscar Grau y Albert Soler y contra el propio Rodríguez Negreira. El Ministerio Público quiere que se reclame a los dos expresidentes "copia de las facturas acreditativas de las operaciones comerciales" mantenidas con las empresas de Negreira entre enero de 2011 y enero de 2014, así como "el medio de pago empleado para la liquidación de dichas facturas y copia de la justificación documental correspondiente, así como copia de los contratos o de la documentación que ampare dichas facturas".

Investigación a Negreira y su entorno

Asimismo, pretende que se lleve a cabo "una investigación patrimonial" de Enríquez Negreira "y de su entorno familiar más próximo al objeto de conocer el destino dado a lo cobrado". Y también que se pida al club azulgrana que revele "la identidad de quienes ostentaban los cargos de director general, CEO o director ejecutivo y el de director financiero, tesorero o jefe del área económica del club en el período comprendido entre los años 2011 a 2014".

Hacienda constató que los pagos realizados por el Barça a Negreira entre 2001 y 2018, mientras era vicepresidente del CTA, superaron los 7,3 millones de euros, lo que supuso "una auténtica remuneración no prevista en los estatutos del club ni aprobada por la Asamblea General por lo que carecía de título que lo justificara". En definitiva, asegura, "dichas percepciones no tuvieron soporte legal ni estatutario alguno".

Asimismo, señala que entre enero de 2011 y enero de 2014, cuando Rosell era presidente culé, la cantidad que se abonó a Negreira "superó los dos millones de euros".