Soluciones Correa (1-0)

El argentino, que reemplazó a Lemar, salió del banquillo para darle al Atlético el triunfo ante un Betis con mucho balón y sin pegada. Los cambios fueron decisivos.

Se presentó el Betis con sus credenciales –mucha posesión del balón, mucho toque y un buen dispositivo táctico con tres centrales y dos carrileros– y el Atlético fue fiel a las suyas. No hizo inventos Simeone, colocó a Kalinic como sustituto de Diego Costa, y procuró, en momentos claves, que la presión alta estuviese en sintonía con el trabajo de todo el equipo. Y así apareció el gol en una segunda parte en donde el equipo rojiblanco fue superior en intensidad y ocasiones. El tanto del triunfo lo hizo Correa, que salió del banquillo para revitalizar a un bloque al que le costaba encontrar el agujero para batir a Pau López. En la jugada decisiva del partido, la que dio los tres puntos al Atlético y le pone en lo alto de la clasificación, también participó Thomas, que, como Correa, había saltado desde el banquillo para reforzar el centro del campo. Conclusión: acertó el técnico atlético con los cambios mientras el Betis penó su indolencia ofensiva –un cabezazo de Mandi que pudo ser el 1-1 y un remate de Loren al comienzo– ante Oblak. También pagó Setién la inoportuna lesión de Guardado. Con William Carvalho el equipo fue menos dinámico y todo el peso creativo recayó en un incansable Canales, al que ayudó Lo Celso en algunas ocasiones.

El partido no se salió del guión. Son dos estilos muy marcados y muy diferentes y el Betis, con jugadores de buen pie, manejó la pelota, especialmente en el primer tiempo, pero no el juego. El Atlético nunca estuvo incómodo. Apareció Kalinic, más lento de pies que Diego Costa, pero también peleón y con desmarques de rotura para crearle problemas a Bartra y Mandi. A su lado Griezmann no ofrecía su mejor versión y tampoco Lemar tenía su tarde más inspirada. Buscaban los espacios los franceses, pero no hallaban soluciones y la producción ofensiva fue escasa. Un par de llegadas, dos tiritos de Antoine y poco más en un equipo que se esforzaba en el centro del campo con Koke, Rodrigo y Saúl para que el Betis hiciese poco ruido, poco daño, a pesar de que el balón era su aliado. Joaquín y Loren no pisaron el área.

Mejoría rojiblanca

Lamentará Setién el cabezazo de Mendi o la falta de Sanabria en el último suspiro, pero el técnico cántabro tendrá que reconocer que el Atlético fue superior en el segundo acto. Desde el aviso de Kalinic (min 52) con un remate al poste hasta el gol de Correa se vio a un equipo dinámico, firme en defensa, perfecto en la presión y en la anticipación, y con las oportunidades de su parte. Emergió la figura de Pau López a disparo de Rodrigo, que detuvo en dos tiempos, porque el Atlético ya era más preciso, acumulaba hombres en ataque y se guardaba de las contras por el buen posicionamiento de Rodrigo, de Koke y de Saúl. Se había incorporado Thomas al trabajo de corte y creación cuando ya Tello había entrado por el agotado Joaquín.

El partido estaba en el alambre o en los pies de Correa. El argentino, uno de los preferidos del Cholo, le robó la pelota a Junior, combinó con Thomas y largó un tiro desde fuera del área colocado al que no llegó Pau. El Atlético encontraba el premio a su esfuerzo colectivo, a su mayor predisposición, a falta de un cuarto de hora. Luego supo manejar el último tramo cuando el Betis quiso arreglar lo que no había hecho antes. Mandi, Sanabria... No era su tarde. La tarde era de Angelito Correa.

Ficha técnica:

1- Atlético: Oblak; Juanfran (Arias, min 74), Godín, Lucas, Filipe Luis; Rodri, Saúl, Koke, Lemar (Correa, min 57); Griezmann y Kalinic (Thomas, min 66).

0- Betis: Pau López; Francis (Sanabria, min 81), Mandi, Bartra, Sidnei, Junior; Guardado (William Carvalho, min 17), Canales; Joaquín (Tello, min 66), Lo Celso y Loren.

Árbitro: Undiano Mallenco. Mostró tarjeta amarilla a Filipe Luis, Godín, Juanfran, Saúl, Bartra, Junior y Loren.

Estadio: Wanda Metropolitano (63.786 espectadores).