Atlético y Barça se neutralizan

Se acabó la primera vuelta para el Atlético y el Barcelona y la clasificación refleja que están empatados a puntos y a casi todo. Apenas unos goles de diferencia más ha logrado el conjunto azulgrana durante 19 jornadas, y por eso terminará líder. La lucha continuará entre dos equipos –con el añadido del Real Madrid– antagónicos, concebidos de forma diferente, que juegan a cosas distintas para llegar al mismo objetivo: la victoria; y que se han neutralizado las tres veces que se han visto esta temporada. Ni en los dos duelos de la Supercopa ni en el de ayer se rompió el equilibrio. Ni la entrada de Messi y Neymar en la segunda parte del Calderón descompuso al equipo de Simeone, sacrificado, peligroso, solidario y que aspira de verdad a todo. ¿Quién puede dudar ahora de ellos?

En estos momentos, no hay rival más incómodo para el Barça que el Atlético. El oficio y los litros de sudor que se dejan los guerreros de Simeone suponen un desafío para las intenciones ofensivas de los de Tata Martino, que en los últimos encuentros también han recuperado el tono físico para ir a la presión. Andaban sobrados de piernas los dos equipos y el encuentro quedó encorsetado en los metros que van de la línea de un área grande a la línea de la otra. Se jugaba casi sin porterías y no había noticias de los porteros, y así fue durante casi toda la noche. Sorprendió el Atleti los primeros minutos yendo a buscar muy arriba al Barça y forzando alguna pérdida en zona peligrosa, como la de Busquets, que tuvo una jornada complicada, a los 30 segundos. No se encerró atrás el Atlético en los primeros instantes. Costa probó a Valdés con un tiro lejano y Arda penetró por la banda hasta llegar prácticamente al área pequeña. Al Barcelona le costaba dar tres pases y vivió agobiado ese rato, aunque poco a poco se fue serenando y fue echando a su rival atrás. Pero el Atlético nunca perdió el orden, ya fuera más adelantado o más cerca de su portero. Con el Cholo eso está prohibido.

También es pecado no ser solidario para perseguir a los rivales, de ahí el desafío para el Barça: las paredes, los rondos y los pases deben ser más rápidos y precisos que nunca, porque si no el balón está perdido. Claro que el Barça también está preparado para el sufrimiento y cuando no tenía la pelota, la recuperaba rápidamente. Ambos conjuntos apenas se dieron un centímetro para maniobrar.

Al Atlético le quemaba el balón y buscaba los contragolpes demasiado rápido, casi siempre con ventaja para los centrales del Barcelona. Las posesiones de los azulgrana eran cada vez más largas, aunque no conseguían filtrar el balón a la media punta para romper por la mitad las dos líneas defensivas. Lo intentó Iniesta, que en el descanso se quedó en el banquillo por un problema en la rodilla, y estaban activos Pedro y Alba para abrir el campo, aunque el lanzamiento del canario a los veinte minutos fue manso.

En el Atlético, Costa se pegaba con todos para buscar los balones largos, pero siempre estaba en desventaja. No importa, el delantero se sabe mover bien ahí. Se precipitaba el conjunto rojiblanco, pero no se descomponía. Y llevaba peligro a balón parado. Los dos equipos se neutralizaban. El Barça dominó el balón y el partido, pero le faltó velocidad y no tuvo profundidad. El Atlético maniataba a su oponente, aunque no lograba contragolpear.

Recuperó fuerzas el Atlético tras el descanso y se rearmó para tener un comienzo similar al del partido, incluso mejor. El duelo entró en un cuerpo a cuerpo en el centro del campo y ahí se sienten bien los rojiblancos. Arda salió de un barullo con una gran maniobra y permitió a Diego Costa rematar... cruzado. Acto seguido, Villa se hizo un lío en el área. Una acción desafortunada, pero que demostraba que el Atlético estaba de vuelta. Tenía arreones que levantaban al Calderón, donde había un ambiente extraordinario.

Martino no tardó en meter en el campo a Messi y Neymar, a los que les costó entrar en juego, sobre todo al brasileño, muy tímido. Leo tuvo chispazos con los que generó las mejores ocasiones, ante las que respondió Courtois. Su presencia no intimidó a los chicos del Cholo, que esta vez no se metieron tan atrás. No dominó tanto el Barça y el duelo se abrió. Pudo pasar cualquier cosa. Se movió en un plano físico más que técnico y al Atlético eso le gusta. La media hora final dejó una batalla sin tregua en el césped. Pareció el Atlético más fuerte por momentos, aunque quedaba un achuchón final del Barcelona que los rojiblancos resistieron. Todo acabó como empezó, pero la Liga arde y promete emociones.

Ficha técnica:

0 - Atlético de Madrid: Courtois; Juanfran, Miranda, Godín, Filipe; Arda, Gabi, Tiago (Cristian Rodríguez, m. 82), Koke; Diego Costa y Villa (Raúl García, m. 76).

0 - Barcelona: Valdés; Alves, Piqué, Mascherano, Jordi Alba; Sergio Busquets, Xavi, Iniesta (Messi, m. 46); Pedro (Sergi Roberto, m. 81), Cesc y Alexis (Neymar, m. 67).

Árbitro: Mateu Lahoz (C. Valenciano). Amonestó a los locales Gabi (m. 43) y Godín (m. 46) y a los visitantes Jordi Alba (m. 57), Mascherano (m. 72) y Alves (m. 83).

Incidencias: partido correspondiente a la decimonovena jornada de la Liga BBVA, disputado en el estadio Vicente Calderón ante 54.800 espectadores. Lleno.