Restringido

Caballero no fue «málaga virgen»...

La Razón
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Empecemos por la agonía final, con Adrián abriéndose mar adentro en el área del Málaga y soltando un disparo que parecía envenenado, el elegido para la gloria. Pero ahí emergió la mano de Willy Caballero, que evitó el gol, el 2-1, el campeonato, el «cholismo» en el santoral. El título tendrá que sudarse en el Camp Nou...

- Dos finales para Costa

No pudo el Atlético sellar el título en el Calderón, al amparo de su hinchada, pese a que lo intentó por tierra, mar y aire, por arriba con vuelos en balones colgados a la cabeza de Raúl García, con su infantería tratando de abrir el campo por las bandas con Juanfran y Filipe Luis, y con los estrategas Koke y Arda por los «callejones del 8 y del 10». Pero no estaba Diego Costa, la bala de oro reservada preventivamente para las dos finales, la de Liga en Barcelona, la de «Champions» contra el Madrid. Y sí aparecieron los nervios, el bloqueo y un rival que no fue «Málaga virgen»...

- Courtois y los fantasmas

Simeone metió a Adrián, Sosa y Diego a la búsqueda de soluciones, apareció como siempre Courtois en un mano a mano salvador ante Santa Cruz (Dios salve a este portero santo y belga), pero también los fantasmas del pasado, de ese «Pupas» felizmente desterrado por el Cholo. Fue un lance cruel, Courtois saliendo mal fuera del área (los santos también cometen pecadillos), Miranda llegando tarde y Toby cruzándose mal, muy mal. La estrategia salió al rescate de este Atlético luchador y Toby enmendó la parte alícuota proporcional de su error en el 0-1 con un testarazo a la salida de un córner. Undécimo gol de un central, si no he perdido la cuenta. Y luego el paradón de Willy. El Atlético sigue rezando por sus dos sueños...