«Cristiano está en lo más alto de su carrera»

Sir Alex Ferguson llegó al Bernabéu apenas una hora después de haber aterrizado en el aeropuerto de Madrid-Barajas y rompiendo la regla no escrita de la «Champions» que afirma que el equipo visitante se entrenará el día anterior al encuentro en el estadio del rival. Pero es que el técnico quería dejarlo todo atado en Manchester y no estaba dispuesto a mostrar ni un ápice de su plan para intentar noquear al Real Madrid. «Sólo puedo decir que queremos ganar, así que haremos nuestro mejor juego. El resultado no será 0-0», afirmó el técnico del equipo inglés. «Lo que sí me gustaría es adivinar qué sorpresa me tiene preparada Mourinho», bromeó Ferguson, consciente de que los blancos también se han dejado la vida preparando esta cita.

La importancia de este encuentro reside en la espectacularidad y la puesta en escena de ambos equipos y, por supuesto, en lo simbólico del duelo que se vivirá en los banquillos. Un entrenador legendario como Ferguson frente al que podría ser su sustituto. «Mourinho deberá esperar. Todavía tengo ilusión por entrenar». Estaba de buen humor el «boss», que definió el partido como «el duelo que todos esperamos», aunque reconoció que «hubiera sido fantástico encontrarnos en la final». Además, el entrenador reconoció que Cristiano Ronaldo, su ex pupilo, iba a ser el hombre a tener en cuenta: «Era muy joven cuando se marchó de Old Trafford y ahora destaca por su madurez. En el Madrid no sólo ha mejorado, sino que ha alcanzado el punto más alto de su carrera». La mayor amenaza para los blancos será un enchufado Robin van Persie, un jugador que cotiza al alza. «La diferencia entre este año y el que perdimos la final de ''Champions'' contra el Barça es la efectividad que él nos ha dado», comentó el técnico.

David de Gea fue el encargado de acompañar a Ferguson en el Bernabéu, estadio en el que el madrileño sabe lo que significa defender la portería rival: «Si Ronaldo pilla bien la pelota, va a ser complicado frenarle. Pero voy a hacer todo lo posible por ganar. De nada nos servirá jugar la vuelta en casa si no sacamos aquí un buen resultado», comentó el meta, que se definió a sí mismo como «mucho mejor portero» que cuando salió del Atlético de Madrid en el verano de 2011.