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El asalto al Bernabéu, nuevo objetivo

El Atlético no tira la Copa y Simeone pide un esfuerzo extra para el derbi

El asalto al Bernabéu, nuevo objetivo
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El «Madrid es mejor», el «partido a partido» o el «nos sacan cuatrocientos millones de ventajas» son frases que se han aprendido de memoria en el vestuario del Atlético como si del mismísimo catecismo de Ripalda se tratase. La realidad –lo del mayor presupuesto del eterno rival y del Barcelona es una obviedad porque los números no engañan– es que estamos en el ecuador de la temporada y el conjunto rojiblanco es líder de la Liga, con tres puntos de ventaja sobre sus millonarios perseguidores, y que en la Copa del Rey y en Europa están a la misma altura. Dentro de un mes, cuando el Madrid rinda visita al Calderón (1 o 2 de marzo) y el Atlético haya jugado en San Siro con el Milan de Seedorf, espía el domingo de los rojiblancos, se podrán calibrar, con mayor criterio, las opciones del equipo de Simeone, que está haciendo la mejor campaña desde el famoso y añorado doblete.

Cuando muchos pensaban, o pensabamos («mea culpa») que el equipo no iba a aguantar, resulta que se ha consolidado en sus ideas, en su forma de jugar y en el aspecto físico, con la buena mano del profesor Ortega, mantiene unas grandes prestaciones. La llegada del brasileño Diego y en menor medida la del argentino Sosa aumentan la competitividad en la plantilla, a la que se une la recuperación de Mario Suárez. Las lesiones de Filipe Luis –Insúa cumplió ante la Real, aunque la papeleta ante Bale o Jesé, mañana, será más complicada– y Villa –el asturiano estará al menos quince días de baja por una elongación en los isquiotibiales de la pierna izquierda– son importantes, pero no definitivas. Villa no ha sido titular en la Copa y en su puesto ha actuado Raúl García, que se ha convertido en el goleador (4) rojiblanco en el torneo, mientras que Filipe es más decisvo en el aspecto ofensivo del juego, especialmente en los partidos del Calderón.

Simeone no se lamenta en público. Al revés, pone buena cara y trata de que todos estén comprometidos al máximo. Por eso el Atlético no tira la Copa y el técnico pide un esfuerzo para plantarle cara al Madrid en el derbi. A Cholo le motiva jugar contra los grandes, porque eso hace crecer futbolísticamente a los suyos.

Con Diego está feliz. El brasileño, que en su anterior etapa no casaba muy bien con Arda en el campo, demostró ante la Real que nunca se había ido. Es el cuarto Diego de un Atlético –Simeone, Godín y Costa– que tratará de revertir la situación. «Gracias a todos por la confianza, es un honor volver a este equipo en el que tuve siempre mi corazón. Yo salí del Atlético, pero el Atlético nunca salió de mí», afirmó Diego (Ribas) ayer, en su presentación.

Diego Costa, dos goles en sus útimas visitas al feudo madridista

Al jugador rojiblanco se le da muy bien el Bernabéu. Marcó en la final de Copa y lo hizo, también, en el partido de Liga de esta temporada. Fue verdugo de Diego López en las dos ocasiones y mañana la víctima del hispanobrasileño puede ser Casillas, al que el destino le depara partidos importantes. El derbi copero es un plus y un aliciente para los rojiblancos, motivados por su técnico para no tirar la competición. Y el duelo ante Sergio Ramos –con el que ha tenido más de una bronca– se presenta apasionante. Además, los dos jugadores están a una tarjeta de la suspensión. El rojiblanco, tras unos encuentros sin marcar, ha vuelto a ver puerta. Es la baza del Atlético.