El Chiringuito de Pedrerol: Me gusta el baloncesto

Los chicos de Pablo Laso han vuelto a dejar retratado al equipo de fútbol con su esfuerzo, su solidaridad, su compromiso y sus incansables ganas de vencer

Da gusto ver a los jugadores del Real Madrid de baloncesto. Son chavales que viven para el deporte. Que disfrutan con lo que hacen. Que sonríen continuamente. Que están agradecidos por jugar en el Madrid. Que son humildes. Que forman una piña. Que van todos a una. Que se apoyan entre ellos. Que son ganadores en la pista. Que hablan poco y trabajan mucho.

- Nunca se rinden

El equipo de Laso es de esos que nunca se rinden. Que no admiten una derrota hasta que suena la bocina, como ayer en Valencia. ¡Vaya canastón! ¡Qué bombazo de Llull! Y eso que el Madrid llegaba a la difícil cancha del líder sin descanso, después de jugar cuatro partidos a vida o muerte en una semana. Pero eso no es nada para este grupo de ganadores natos. Fueron capaces de ofrecer el máximo esfuerzo sobre el parqué y de llevarse la victoria. Es un equipo insaciable, que no se cansa de ganar. Un grupo ejemplar que representa los valores del Real Madrid. El orgullo de todo el madridismo. Los únicos capaces de levantar ahora mismo a una afición desencantada.

- Zizou no merece esto

Este Madrid de básket es el espejo en el que deberían mirarse ahora mismo sus compañeros del fútbol. Zidane no merece lo que le están haciendo. Ha dado la cara por todos los jugadores, incluso por aquellos que no se lo han ganado, aquellos que no pueden continuar ni un día más vistiendo esa camiseta. La afición blanca se agarra a la Undécima, pero con esa dinámica será muy difícil levantarla.

- Hay que reaccionar

El conjunto de baloncesto ha vuelto a dejar retratado al de fútbol. La diferencia es brutal. ¡Basta de dejadez y de pasotismo! Hace falta más implicación, más compañerismo, más solidaridad. Hace falta ser más equipo. Hace falta una reacción de verdad. Y hace falta mostrar más dignidad. No pueden permitir que les pisotee cualquiera en la Liga, ni que el Atlético les siga pintando la cara derbi tras derbi. Su obligación es pelear por la segunda plaza y demostrar que son los que mandan en la capital.

- Intocable

Lo decimos en portada: Zidane es el hombre. Por él pasa el futuro. La confianza en el proyecto de Pablo Laso en los momentos difíciles ha resultado decisiva en la sección de básket y la misma fórmula debe servir para el fútbol. Zizou aún sonríe, pero toma nota de todo. Sabe lo que está pasando y a final de temporada llegará el momento de actuar con la cabeza fría. Dejará a un lado las buenas caras y las palabras amables, y tomará decisiones que quizá sean traumáticas. Pero que son las únicas que pueden devolver al Madrid a su lugar. Al que ahora mismo ocupan los chicos del baloncesto.