El complicado otoño del Barça

«Todavía no tengo decidido el portero que empezará la Liga. El año pasado hice una elección con los porteros. Este año puede ser la misma o no... Va en función de lo que siento en cada momento y ellos lo saben. Quiero tenerlos a todos preparados para jugar», asegura Luis Enrique. Sirva el ejemplo de los guardametas para todo el equipo: seguirá habiendo rotaciones porque es la filosofía que tiene el entrenador del Barcelona, y la que le ha dado resultados en los equipos en los que ha estado. Pero una duda se ha despertado esta pretemporada: ¿mantiene el nivel la segunda unidad respecto al equipo teóricamente titular? En la ida de la Supercopa no sucedió así. Bartra ha hecho una mala pretemporada. Sergi Roberto lo hizo bien en los amistosos, pero ante el Athletic naufragó junto a Rafinha en el centro del campo. Vermaelen es una incógnita porque lleva prácticamente un año sin jugar y Sandro y Munir, después de su comienzo fulgurante el pasado curso, se han quedado estancados, incluso descendieron de categoría con el filial. Ahora forman parte de la primera plantilla y deben ser los que den descanso al «tridente». A todo ello se une la posible marcha de Pedro, un suplente-titular de garantías que quiere buscar minutos en Manchester. Si se va es posible que el Barcelona se refuerce con Nolito, pero el gaditano no podría jugar hasta enero por la sanción de la FIFA, lo mismo que los dos fichajes, Aleix Vidal y Arda Turan. Su presencia a partir de 2016 se antoja fundamental, el problema es que el calendario no ha sido muy benévolo con el Barcelona en este comienzo. Tendrá que afrontar sin refuerzos las salidas más complicadas del campeonato: San Mamés es la primera, y ya se sabe lo que pasó en la Supercopa; después tiene que visitar al Atlético, al Celta, al Sevilla, al Real Madrid o al Valencia. «Estoy deseando que acabe el mercado de una maldita vez para saber con qué jugadores cuento», admitió Luis Enrique tras la pérdida de la Supercopa.

Neymar tampoco llegará, al menos en las mejores condiciones, a las primeras jornadas de Liga por culpa de unas paperas. En los laterales tiene también un problema el conjunto azulgrana. Para el derecho están Alves, Douglas (lesionado y con una gran interrogante sobre su rendimiento), la alternativa de Sergi Roberto, probada durante la pretemporada, o Adriano, que también está ahora en la enfermería. Para el izquierdo, Jordi Alba tiene una rotura de fibras. Sus continuas lesiones musculares no le dejan tener la continuidad deseada. Mathieu es otra opción, pero ha sido uno de los jugadores marcados en los tres partidos oficiales (en uno de ellos incluso se quedó fuera de la convocatoria). El francés fue un futbolista determinante, al final de la temporada pasada con sus goles al Celta o al Real Madrid, pero como lateral no ha terminado de funcionar. Su rendimiento ha sido mayor actuando de central.

Tiene un arranque complicado el campeón que, eso sí, cuando juega con el once de gala ha mostrado buenas maneras, todavía sin estar en plena forma. El año pasado llegaron frescos al final gracias a las rotaciones.