El Getafe no se encuentra

Otro paso atrás dio el Getafe en su comienzo de curso. La segunda derrota en tres partidos llegó en Valladolid y sólo el pluriempleo de Moyá en la segunda parte evitó que fuera más abultada. Un gol de Marc Valiente a la salida de un córner bastó a los pucelanos, que merecieron cerrar el partido mucho antes de que Sarabia tuviese la oportunidad de empatar cuando el tiempo se cumplía.

Más allá de la cuestión numérica, que no es buena (1 punto de 9 posibles), las sensaciones que desprenden los azulones no son buenas. El equipo tiene más fútbol del que ha demostrado, pero no acaba de despertar. En Zorrilla recibió el gol a la salida de un córner nada más volver del descanso y da la sensación de que es un bloque que no sabe a qué estilo de juego apuntarse. No tiene espíritu ni jugadores para ser un equipo malencarado que deje su suerte al sudor, pero tampoco acaba Luis García de dar con un once en el que sus jugadores con más talento puedan asociarse.

Pedro Léon, Diego Castro o Lafita hicieron la guerra por su cuenta en un ataque poco fluido y en el que el balón no era feliz. Después entraron Sarabia y Mosquera en busca de otro esquema, pero ya todo eran nervios y prisas. Mientras el Getafe se derretía, el Valladolid ganaba sus primeros tres puntos y mucha confianza gracias a una actuación muy convincente y que hubiera conseguido más premio de no ser por un inspiradísimo Moyá.

q Lisandro llega cedido. Para tratar de aliviar la situación en el Coliseum, que todo ayuda, Ángel Torres va a conseguir que el Benfica le preste al defensa argentino Lisandro López. Quizá le vendría mejor el veterano delantero de mismo nombre.