El Villarreal eliminó este jueves al Getafe y alcanzó por primera vez en su historia las semifinales de la Copa del Rey, competición en la que se enfrentará al Barcelona por segunda vez para luchar por acudir a la final de la competición.

El conjunto castellonense ha logrado atravesar la frontera de los cuartos de final. El Getafe era su último obstáculo para conseguir un registro inédito en el club y el conjunto de Quique Sánchez Flores no pudo remontar el 1-0 del choque de ida que ayudó al Villarreal a llegar a una ronda que nunca saboreó hasta ahora. Hoy volvió a ganar en la vuelta por 0-1.

Los cuartos de final siempre marcaron el límite de la escuadra amarilla. Antes de enfrentarse al Getafe, se había atascado en esa ronda hasta en cuatro ocasiones. En 1992 el Valencia fue su verdugo; en 2001, el Athletic; en 2008, el Barcelona; y en 2010 el Sevilla.

Ahora, su rival será precisamente el cuadro azulgrana, contra el que se ha visto las caras en Copa en dos ocasiones. La segunda, la ya citada de 2007, cuando el chileno Manuel Pellegrini estaba en el banquillo del Villarreal.

De aquella eliminatoria sobrevive el centrocampista Bruno Soriano, que fue testigo directo del empate sin goles en el choque de ida disputado en el estadio de El Madrigal. Su nombre, junto a otros como los de Diego López, Nihat Kahveci, Diego Godin, Giuseppe Rossi, Robert Pires, Santi Cazorla o Marcos Senna, forma parte del recuerdo de un duelo que no selló la clasificación de ninguno.

En la vuelta, el Barcelona de Frank Rijkaard ganó 1-0 con un tanto de Thierry Henry protestado por los jugadores del Villarreal, que entendieron que el francés lo marcó en fuera de juego. Al final, ese gol bastó para eliminar al Villarreal, que por segunda vez en su historia fue eliminado por el Barcelona.

El primer precedente aconteció en la temporada 1970/1971, en dieciseisavos de final, y también con el mismo resultado: el Villarreal, que militaba en Segunda División, fue eliminado. Sin embargo, presentó más batalla y en la ida ganó 1-0 con un tanto en propia meta de Bartolomé Paredes.

Ese resultado obligó al Barcelona a emplearse a fondo en la vuelta, disputada en el Camp Nou, donde el conjunto que dirigía el inglés Victor Buckingham ganó 2-0 con goles de Teófilo Dueñas y Narcis Martí Filosia. Ese resultado bastó al cuadro azulgrana para alcanzar los octavos de final de una Copa del Rey que después ganó tras vencer al Valencia en la final.

Casi 45 años después de aquellos dos encuentros, los dos clubes volverán a verse las caras por tercera vez en la Copa del Rey. Para el Villarreal serán dos encuentros más especiales. El Barcelona, acostumbrado a disputar finales, no tendrá los mismos alicientes que un rival que competirá por seguir haciendo historia.