Grupo del Atlético de Madrid en el Mundial de Clubes 2025: rivales y partidos

El Atlético de Madrid afronta uno de los mayores retos de su historia reciente con su participación en el Mundial de Clubes de la FIFA 2025, que por primera vez adoptará un formato ampliado con 32 equipos y se celebrará en Estados Unidos entre el 15 de junio y el 13 de julio. La competición promete reunir a lo más granado del fútbol mundial en una cita que marcará un antes y un después en el calendario futbolístico global.

El equipo dirigido por Diego Pablo Simeone ha quedado encuadrado en el Grupo B, donde compartirá cartel con tres rivales de peso: el Paris Saint-Germain (Francia), los Seattle Sounders (Estados Unidos) y el Botafogo (Brasil). Se trata de un grupo complejo, diverso y repleto de matices futbolísticos que pondrá a prueba tanto la experiencia europea de los rojiblancos como su capacidad de adaptación a nuevos entornos y estilos de juego.

Un calendario exigente desde el primer día para el Atlético de Madrid: grupo y partidos

El debut del Atlético será de alto voltaje. El domingo 15 de junio, el conjunto colchonero se medirá al Paris Saint-Germain en el mítico Rose Bowl de Los Ángeles, con el inicio previsto para las 21:00 horas (hora peninsular española). Será un reencuentro con viejos conocidos como Kylian Mbappé, si finalmente decide quedarse en el club francés, y una oportunidad para ver cómo se mide el Atlético a uno de los equipos con mayor presupuesto y proyección internacional.

El segundo encuentro llegará en la madrugada del jueves 19 de junio (00:00 h.), cuando los rojiblancos se enfrenten a los Seattle Sounders en el Lumen Field, un estadio donde la afición local juega un papel fundamental y convierte cada partido en una auténtica olla a presión. Campeón de la Concacaf en 2022, el equipo estadounidense cuenta con experiencia en partidos internacionales y conoce bien las condiciones climáticas y logísticas de su país, lo que podría suponer una ligera ventaja.

Finalmente, el Atlético cerrará la fase de grupos el lunes 23 de junio, nuevamente en el Rose Bowl de Los Ángeles, enfrentándose a Botafogo, uno de los clubes brasileños más históricos y que ha resurgido con fuerza tras conquistar la Copa Libertadores 2024. El duelo, programado también a las 21:00 horas, pondrá fin a una primera fase en la que cada punto será crucial.

Un formato renovado, al estilo del Mundial de selecciones

Esta edición del Mundial de Clubes introduce un formato inédito, claramente inspirado en la Copa del Mundo de selecciones. Serán 32 los equipos participantes, divididos en ocho grupos de cuatro conjuntos, de los cuales los dos primeros de cada grupo pasarán a los octavos de final. A partir de ahí, se jugarán eliminatorias directas hasta la gran final.

El objetivo de la FIFA con este nuevo diseño es claro: convertir el Mundial de Clubes en una competición verdaderamente global, que combine lo mejor del fútbol europeo, sudamericano, asiático, africano, norteamericano y oceánico, en un entorno competitivo y comercial de primer nivel.

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Objetivo: competir por el Mundial de Clubes 2025

La clasificación del Atlético de Madrid para esta cita responde a su regularidad en Europa entre 2021 y 2024, donde, si bien no logró levantar la Champions League, sí acumuló méritos suficientes para asegurarse un lugar entre la élite mundial. Ahora, con una plantilla consolidada, mezcla de talento joven y experiencia, y la dirección inflexible de Simeone, el club se marca el ambicioso objetivo de llegar lo más lejos posible e incluso luchar por el título.

Los rojiblancos no solo representan al fútbol español, sino también a una manera de competir que ha dado frutos durante más de una década. La intensidad táctica, la disciplina defensiva y la capacidad para adaptarse al rival serán claves ante estilos tan distintos como el fútbol ofensivo del PSG, la presión alta y verticalidad del Seattle Sounders, o el juego técnico y creativo del Botafogo.

El Atlético de Madrid afronta este Mundial de Clubes como una oportunidad única para hacer historia y consagrarse como campeón del mundo en una era en la que el fútbol de clubes está más globalizado que nunca.