Modric, el comandante silencioso

El Real Madrid de Zidane sigue al alza. El fútbol regresaba al Bernabéu después de una semana ajetreada tras conocerse la sanción de la FIFA y sobre la hierba del estadio blanco volvió a quedar patente que el técnico galo dispone de una de las mejores plantillas de la historia. Zizou efectuó numerosos cambios en el equipo titular y la verdad es que el Madrid sin jugar un gran partido se deshizo de Osasuna con una facilidad pasmosa. La decisión de no poder fichar durante dos veranos no va a tener consecuencias negativas.

- Ovación al croata

Ante los rojillos de Martín, hay un hombre que brilló con luz propia. Sí, estoy hablando de Modric. El croata volvió a rozar la perfección sobre el césped del Bernabéu. Dirigió, asistió, marcó y fue dueño y señor del centro del campo. Mandó con talento y maestría y lanzó los peligrosísimos contragolpes del equipo. Y por si fuera poco, adornó su excelente actuación con un gol de bandera desde fuera del área. Cuando Zidane decidió darle descanso por la Champions, el Bernabéu puesto en pie le despidió con la mejor ovación de la tarde. Los que hemos tenido la fortuna de jugar en este gran equipo, sabemos el orgullo y la satisfacción que se siente cuando un público tan entendido y exigente te despide de esta forma maravillosa. Los vellos se te ponen de punta.

- Ejemplo

Luka es un jugador tremendamente inteligente, es la prolongación de Zizou dentro del campo. El míster le pide que remate de media distancia porque posee un potente disparo y el gol que consiguió le demuestra la capacidad que tiene para encontrar las redes rivales. Modric sigue consolidándose como uno de los mejores centrocampistas del mundo, y a diferencia de otros como Xavi, tiene un comportamiento ejemplar dentro y fuera del campo. Es el comandante silencioso del Madrid.