Mourinho exige más

Todo final de año que se precie viene acompañado de un balance que analiza el trabajo de los últimos meses; y el técnico del Real Madrid también ha hecho el suyo. Tras un turbulento diciembre en el que las cuestiones extradeportivas han eclipsado el rumbo del equipo, José Mourinho ha decidido tomar de nuevo el timón y centrarse en el partido de esta noche contra el Málaga; un encuentro con el que, además, el entrenador del Madrid suma su partido 400 al frente de equipos de Primera División.

El técnico portugués confesó que, lejos de estar contento con el equipo, «la plantilla debe mejorar en todo». Los blancos tienen en su mano la oportunidad de desprenderse de la endeble imagen ofrecida en los últimos partidos y terminar el año con una victoria ante un equipo lleno de viejos conocidos. En el banquillo malagueño estará el antecesor de «Mou», Manuel Pellegrini, quien ha conseguido encarrilar al equipo revelación de esta temporada y ha descubierto a uno de los diamantes en bruto de esta Liga, el canterano Isco. «Para el Málaga sólo tengo palabras positivas. Son efectivos en defensa y creativos en ataque», comentó Mourinho.

Tras el partido en La Rosaleda, la plantilla tendrá unos días de descanso; sin embargo, este año las vacaciones serán un poco más cortas que de costumbre. «El equipo debe trabajar en Navidad para mejorar», apuntó el técnico madridista después de valorar como «bueno» el año que termina. «El balance es sencillo. Hemos ganado la Liga y la Supercopa, y los culpables de la situación actual del equipo son los mismos que los que consiguieron los títulos».

«Mou», quien también descartó cualquier movimiento en la plantilla en el mercado de invierno –incluida la salida de Kaká–, no quiso pronunciarse sobre el mensaje navideño de Florentino Pérez ante la Prensa en el que pedía «menos tensión dentro del club». El portugués tampoco desveló si había contactado personalmente con Tito Vilanova para darle ánimo tras su operación.