Juicio

El movimiento "in extremis" que puede salvar a Dani Alves del banquillo

La defensa del brasileño sigue trabajando en su plan para que el juicio no llegue a celebrarse

Dani Alves y su abogada, Inés Guardiola
Dani Alves y su abogada, Inés GuardiolaTwitter

La Audiencia de Barcelona se prepara para el que ya ha sido bautizado como El Juicio del Año, el que justo dentro de seis días y a lo largo de tres jornadas sentará en el banquillo al futbolista Dani Alves por un presunto delito de agresión sexual con penetración.la cita está prevista para el próximo el lunes 5 de febrero a partir de las 10:00 horas. Un juicio al que el brasileño se presenta alegando el consumo de alcohol como su última versión de los hechos pero que podría no llegar a celebrarse.

El pasado mes de noviembre la víctima de la presunta agresión sexual del exfutbolista del FC Barcelona, Dani Alves, asestaba un duro golpe al futbolista al asegurar a través de un comunicado de su letrada, Ester García, que las conversaciones mantenidas hasta ahora con la defensa del futbolista, "a instancias de esta y que consideramos confidenciales", resultaron "en la imposibilidad de alcanzar entendimiento alguno", por las distintas posiciones de las partes "respecto a la extrema gravedad de los hechos y las penas a imponer".

En estas conversaciones, según adelantó El Periódico de Cataluña, la defensa barajó la posibilidad de indemnizar a la denunciante con una importante cantidad de dinero. En este sentido, la letrada señala en su comunicado que "cualquier delito contra la libertad sexual los daños morales y las secuelas son irreparables", dando a entender que el posible pacto es prácticamente imposible si se ciñe a una cuestión económica. Tras el fracaso de los recursos de su excarcelación, la nueva letrada del futbolista Inés Guardiola se centró en perfilar un posible acuerdo con la justicia. Según el medio citado, la estrategia del brasileño pasaba por llegar a un acuerdo para reducir lo máximo posible su condena, pues se enfrenta ahora mismo a una pena de cárcel de entre ocho y diez años.

Un posible acuerdo que han estado negociando y cuyas propuestas principales eran unos 4 años de pena y una "jugosa" indemnización a la víctima. Sin embrago, y a pesar de que esta posibilidad parecía cerrada, las conversaciones continúan y Alves cuenta con este último movimiento que podría salvarle del banquillo.

Así lo ha asegurado en Telecinco Mayka Navarro que ha puntualizado que aún se podría llegar a un acuerdo de conformidad para que el juicio no se celebre finalmente.

"La defensa de Dani Alves sigue buscando ese acuerdo", ha asegurado la periodista. Para ello, "él tendría que reconocer que esa noche del 31 de diciembre agredió sexualmente a la joven de 23 años". Navarro ha recordado que en el comienzo de este caso, Cristóbal Martell, primer abogado del exfutbolista, y Esther García, letrada que defiende a la víctima, se sentaron con conocimiento de la Fiscalía. "Se barajaban los años de condena y la responsabilidad civil, muy por encima de los 150.00 euros que fijó en el último momento la juez instructora". Unas conversaciones que continuó Inés Guardiola posteriormente, aunque los hechos sucedidos en las últimas semanas las paralizaron. "No favoreció la difusión de las imágenes de la familia de Dani Alves de la identidad de la joven", asegura la periodista.

A pesar de ello, las negociaciones se han retomado y ninguna de las partes descarta ya la posibilidad de un pacto "in extremis"

La decisión de la víctima será clave

Sin embargo puede que el proceso no sea tan sencillo. Ya que para que se produzca este acuerdo todas partes deben ratificarlo. Una negociación de culpabilidad es un acuerdo entre el fiscal y la persona acusada del delito, donde el fiscal le ofrece al acusado la oportunidad de declararse culpable a cambio de recibir un cargo menos grave y con una sentencia más leve. Declararse inocente del cargo penal implica que el acusado irá a juicio para contender los cargos penales. Si resulta inocente, entonces evita pasar tiempo en prisión u otras sanciones. Sin embargo, ir a juicio es arriesgado porque es imposible predecir cual será la sentencia final. En consecuencia, muchos acusados - como sería el caso de Alves- escogen negociar los cargos con el fiscal.

La abogada de la joven denunciante reveló que la víctima “está recibiendo apoyo psicológico a través de una entidad pública especializada en el tratamiento de víctimas de violencia” y también cual fue la condición que le puso su cliente para contratarla. García López, aseguró que rechazaría una eventual propuesta de acuerdo para evitar una condena del futbolista, en una entrevista publicada por el portal brasileño UOL. García subrayó que su cliente había rechazado de forma «firme» y reiterada la posibilidad de recibir una indemnización por parte de su presunto agresor, a la que tendría derecho, dado que dispone de una buena posición financiera, y solo quiere que se haga justicia.

Según la letrada las palabras exactas de la demandante fueron: «Si hay dinero de indemnización en medio, no te voy a contratar. Yo no quiero dinero, quiero cárcel’. “Ella, desde el primer minuto, me dijo que no. Eso nadie lo sabe», dijo la abogada, recalcando que la amenaza de su cliente no era simplemente una estrategia.

Tal vez, el hecho de que ahora la negociación no suponga la libertad del futbolista a cambio de una indemnización sino una reducción de su pena podría llevar a la víctima a aceptar el acuerdo para evitar el calvario de someterse a un juicio y tener que revivir lo que pasó aquella noche. De no ser así, la estrategia de defensa del futbolista no valdría para nada.

Cabe recordar que el "acuerdo de conformidad" puede solicitarse incluso si el juicio ha comenzado. Esto significa que llegar a un acuerdo es posible hasta el segundo previo a que el juez dicte sentencia. En estos casos, la solicitud de mediación paraliza el desarrollo del mismo y concede tiempo para que las personas implicadas negocien. Si alcanzan el acuerdo, el juicio no continuaría.