Lérida

Milinkovic Savic, la perla serbia que nació en Lérida

Sergej Milinkovic-Savic controla un balón en el calentamiento previo al Serbia-Suiza de la segunda jornada
Sergej Milinkovic-Savic controla un balón en el calentamiento previo al Serbia-Suiza de la segunda jornadalarazon

De una jugadora de baloncesto que llegó a disputar la Euroliga (Milijana Savic) y de un futbolista bosnio qaue jugó en el Lleida que dirigía Mané (Nikola Milinkovic) nació la nueva perla del fútbol serbio. Sergej Milinkovic-Savic, que así se llama la criatura, sería lo que en otros tiempos se denominó un todocampista, capaz de actuar en el mediocentro y también pisar el área contraria. Con más de 1,90 metros de altura es un peligro a balón parado y con 23 años partía como candidato a jugador revelación en esta Copa del Mundo. De momento lo que ya está consiguiendo es superar las metas deportivas de sus progenitores, porque su padre nunca alcanzó el nivel que ya tiene su primogénito. Nikola Milinkovic jugó quince partidos en primera como delantero de aquel Lleida que en 1994 derrotó al Real Madrid y desató la ira de Benito Floro dentro del vestuario con una monumental bronca que captaron los micrófonos. En aquel partido entró en la segunda mitad, en un papel de revulsivo que también interpretó muchas veces en la siguiente temporada con el conjunto catalán ya en Segunda. Precisamente porque jugaba allí, su hijo Sergej tiene a Lérida como ciudad de nacimiento en su pasaporte. Después emigró a Almería y más tarde pasó dos cursos en Orense, de ahí que Vajna, el hermano pequeño de la familia, sea gallego al menos de origen. El benjamín también juega al fútbol, aunque con los guantes puestos y entre los tres palos. La temporada pasada llegó a debutar con el Torino, pero parece claro que no tiene la dimensión futbolística del otro hermano, al que no han tardado en rodearlo todo tipo de rumores sobre el interés de los más grandes de Europa. Se dice que el Manchester United ha hecho al Lazio una oferta que supera los cien millones y, cómo no, también se ha comentado que el Real Madrid lo tiene en su radar. Palabras mayores para un chico que acaba de llegar a la élite y que antes de saber si juega hoy contra Brasil suma seis partidos como internacional absoluto. Forma parte de la nueva generación serbia que levantó el Europeo sub'19 en 2013 y el Mundial sub'20 en 2015, y tendría en su currículum más partidos con los mayores de haber sido del gusto del entrenador que llevó a los balcánicos hasta Rusia. Slavoljub Muslin hizo un buen trabajo devolviendo a su país a una gran competición, pero no contaba con Milinkovic-Savic, algo que le condenó al despido, ya que la Federación no quería perder a su mejor jugador de futuro. Krstajic es su sustituto y lo primero que hizo fue poner en el once a Sergej, el serbio que nació en Lérida.