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Qatar 2022

Mundial de Qatar 2022/ Así es Hamad Al Thani, el poderoso emir que se ha comprado el Mundial más caro de la historia

La dinastía Qatarí ha logrado extender sus tentáculos por el mundo con el fútbol como punta de lanza. A pesar de las sombras de corrupción y violación de derechos humanos, el próximo domingo ocuparán el foco internacional en la Inauguración de la cita futbolística más importante del planeta.

Tamim bin Hamad Al Thani, junto al presidente de la FIFA Gianni Infantino
Tamim bin Hamad Al Thani, junto al presidente de la FIFA Gianni InfantinoDPA vía Europa PressDPA vía Europa Press

Quedan días para que el Mundial más polémico y caro de la historia de sus primeros toques de balón. El partido inaugural se disputará el próximo domingo 20 de noviembre de 2022 en el estadio Al Bayt para gloria de la poderosa dinastía qatarí.

Pero¿Quién es Hamad Al Thani, el “jeque del fútbol”? Detrás del poderío económico del emirato de Qatar, de su influencia regional, de sus cuentas pendientes en materia de derechos humanos y también de la elección del país como sede de la Copa Mundial 2022, se encuentra la casa de Al Thani, que gobierna el país desde la segunda mitad del siglo XIX. Sheikh Tamim bin Hamad Al Thani tiene de 42 años y accedió al trono en el año 2013, después de que su padre Hamad bin Jalifa Al Thani anunció su deseo de abdicar.

Tamim bin Hamad Al Thani nació el 3 de junio de 1980 en Doha y cursó sus estudios secundarios en Reino Unido, de acuerdo con la información biográfica oficial. Luego, asistió a la academia militar de Sandhurst, la misma que los príncipes birtánicos William y Harry, para cursar estudios universitarios y regresó en 1998.

El fútbol como arma de poder

En el año 2000 se hizo cargo del Comité Olímpico de Qatar, y participó activamente de las gestiones en 2009 para que su país fuera elegido como sede de la Copa Mundial FIFA 2022. Pero el fútbol fue un salto cualitativo que afianzaría el poder de la dinastía a nivel internacional. En 2005 fundó Qatar Sports Investments, clave para hacerse, entre otros, con el control del Paris Saint Germain en 2011 a través de su actual presidente, Nasser Al-Khelaifi. También invirtió en el Barcelona y sueña con llevar a su país los Juegos Olímpicos.

En 2010 logró el golpe definitivo al lograr la organización de este Mundial. Fue un proceso marcado por la poca transparencia y las acusaciones de compra de votos. De hecho, según Der Spiegel sólo dos de los veinticuatro dirigentes que integran el Comité Ejecutivo de la FIFA -decisivos para conceder el mundial a Qatar-, un británico y un japonés, están libres de sospechas de corrupción. Pero nada frenó a la poderosa maquinaria Qatarí. A pesar de los 6.500 muertos que han dejado las obras de sus estadios, las acusaciones de Amnistía internacional - con jornadas de 60 horas a la semana sin descanso- de trabajos forzados, la aberración medioambiantal que supone este mundial o las acusaciones de soborno a parlamentarios británicos, la fiesta del fútbol arrancará el próximo domingo en Qatar como si no pasara nada y con el emir como protagonista.

En 2008 Tamim participó también en el lanzamiento del plan de desarrollo Visión Nacional de Qatar 2030, programa basado en la “justicia, benevolencia e igualdad”, y quien sería el futuro emir fue un promotor de la “continua modernización y desarrollo de las instituciones públicas” en el plan estratégico a cinco años lanzado por el país en 2011.

El emir Tamim se convirtió el 25 de junio de 2013 el líder más joven de Medio Oriente cuando asumió a los 33 años. Hoy día solo el príncipe heredero de Arabia Saudita Mohammed bin Salman es más joven con 36 años, aunque todavía no asumió.

Tamim fue el primer líder del golfo Pérsico en visitar Estados Unidos tras la asunción de Joe Biden como presidente: ocurrió en febrero de 2022, cuando pudo verse al emir vestido de traje al estilo occidental, junto al mandatario estadounidense.

El monarca de Qatar es el encargado de administrar las reservas de petróleo y gas del país por lo que su fortuna oscila entre el 1.2 y los 2.1 mil millones (billones) de dólares. Actualmente, la familia real cuenta además con acciones en la Bolsa de Londres; compró marcas emblemáticas como las tiendas Harrods, las joyerías Tiffany, el estudio de Hollywood Miramax, y también participa en empresas globales como British Airways, los bancos Barclays y Credit Suisse, entre muchas otras.

En lo personal, el emir tiene tres esposas (de acuerdo a la ley islámica, podría tener hasta cuatro, siempre que atienda las necesidades económicas de todas y las trate equitativamente) y 13 hijos (siete varones y seis niñas). Su vida opulenta tampoco ha pasado desapercibida. Su familia es dueña de la residencia más cara del Reino Unido, por la que pagó más de 160 millones de euros en el centro Londres; y estiman que poseen más propiedades que la familia real británica en la capital de ese país.

Se calcula que Tamim tiene una fortuna cinco veces mayor que la reina de Inglaterra, unos 2.200 millones de euros.