Mundial de Qatar 2022. Francia-Polonia. Mbappé y adiós

Mbappé marca la diferencia y Francia lo mira a él para alimentar sus esperanzas de repetir su triunfo en el Mundial. Como pasador o como goleador, Kylian sobresale por encima del resto.

Primero fue Giroud el que ejecutó lo que Mbappé había creado para poner a Francia por delante. El «9» de Francia marcó el primer gol del partido después de un pase del «10» que lo dejó solo delante de Szczesny. A la media vuelta, en un movimiento de delantero puro, marcó el gol que llevaba a Francia a los cuartos de final.

Pudieron ser dos, porque el delantero del Milan marcó uno más en una chilena espectacular que el árbitro anuló por una falta previa al portero polaco que no era.

Muy lejos está este Mundial de Giroud del pasado, en el que Francia fue campeona sin que su delantero consiguiera marcar. Una tradición de la selección francesa, que ya fue campeona en el 98 sin que su número «9», Guivarch’, marcara un solo gol.

Para eso Francia ya tenía a otros. Tiene la velocidad de Dembélé y de Mbappé por los costados, por ejemplo. Y entre los dos combinaron para marcar el segundo. Arrancó el extremo del Barcelona en una jugada de esas que tanto le gustan, partiendo desde la banda y abriéndose camino hacia el centro hasta que encontró la manera de hacer llegar la pelota a Mbappé. Tuvo tiempo de colocarse la pelota antes de soltar un latigazo que condenaba a Polonia a remar inútilmente el resto del partido.

Juega con una facilidad insultante Mbappé, hace que todo parezca sencillo. Pero casi tan importante para Francia como él es Antoine Griezmann. El jugador del Atlético de Madrid se ha adaptado a la posición de interior desde la que hace jugar a su equipo. Pero, además, sabe correr hacia atrás, como demostró en la jugada de ese gol de Mbappé. El contraataque nace en una pelota que recupera en su propia área.

Griezmann no se cansa de hacer cosas para el equipo, en su área o en la contraria. El futbolista imprescindible para Deschamps. Francia lo necesitaba para derrotar a la mejor versión de Polonia de este campeonato. Tiene tantos jugadores arriba el seleccionador francés que prefiere a Griezmann ahí. Sin tanta velocidad como sus extremos, es el compañero perfecto para lanzarles alimentos.

Los polacos se atrevieron a pisar el área francesa como nunca lo habían hecho en este campeonato. Y Zielinski remató dos veces en la misma jugada que Lloris despejó con las rodillas. Pero duró un rato esa ambición y tampoco era fácil para Lewandowski buscar su momento. Acostumbrado a jugar en equipos que producen ocasiones de manera constante, sufre para administrarse en la pobreza de su selección.

Aun así, tuvo su oportunidad en un lanzamiento de penalti que el árbitro señaló con ayuda del VAR y que ordenó repetir después de que Lloris se adelantara en el primer disparo que detuvo al jugador del Barcelona. A la segunda acertó, aunque repitió la «paradinha» que había resultado tan inútil a la primera.

Pero antes había llegado el tercero de Francia, el segundo de Mbappé, que se tomó la segunda parte como si fuera un ejercicio de tiro. Desde una posición parecida, clavó la pelota en el ángulo contrario. Un jugador superior sobre el césped el francés, que camina dispuesto a ganar su segundo Mundial con sólo 23 años.

Kylian cumple los 24 dos días después de que acabe el Mundial, pero no hay un jugador en el mundo que pueda competir con él. Francia lo resiste todo, hasta las ausencias más importantes, sólo porque lo tiene a él.