Fútbol

Inter-Real Madrid (0-1): La juventud reina en Milán

Rodrygo marcó el tanto de la victoria del equipo de Ancelotti a pocos minutos del final tras una buena jugada de Camavinga

Rodrygo celebra su gol
Rodrygo celebra su golAntonio CalanniAgencia AP

Hazard se pasó la segunda parte calentando en la banda, también Isco. Pero quien sustituyó a Modric, que recibió un emocionante aplauso al irse, fue Camavinga. A sus 18 años marcó en su estreno contra el Celta en LaLiga y en su segundo día encontró el camino por dentro para superar a la defensa del Inter. Lo que no había logrado nadie hasta entonces, porque el Madrid sólo llegaba por fuera. Su pase lo remató Rodrygo y el conjunto de Ancelotti ganó a un rival muy complicado gracias a una segunda parte de superación, con las carreras de Vini, el pulmón de Valverde y la aparición de los dos suplentes.

Aprendió el Madrid a sufrir en Milan, en un partido al que le costó encontrar el tono. No tuvo buena pinta en la primera parte. Pero ahí apareció Courtois, quien detuvo el entusiasmo de los italianos. La temporada es muy larga y unos días serán para Vinicius y eso significará alegría; y otros serán los del portero belga y eso, como sucedió antes del descanso contra el Inter, querrá decir que hubo momentos difíciles, pero que se sobrevivió. Courtois evitó el gol rival y sostuvo al Madrid, hasta que por fin sus compañeros se soltaron. El club le considera una pieza fundamental en la estructura del equipo y él responde con un encuentro como que se marcó en la primera parte de Milán. Cuando está así, siempre hay esperanza.

La claridad con la que llega Vini al área rival es el termómetro en ataque de los de Ancelotti. Es la solución más rápida para el Real Madrid, un atajo para lograr resultados y solucionar casi todo, pero no hubo manera durante la primera parte porque el Inter ya estaba avisado del peligro actual de brasileño y siempre se encontró con dos hombres que superar. Lo intentó Vini porque otra cosa no, pero se deja la vida cada vez que arranca y en todas sus aventuras encontraba una pierna rival. Tuvo menos piernas en contras después, tras el descanso, con el Madrid más armónico o más junto al atacar y al defender y con Valverde haciendo más daño con sus llegadas. Entonces sí que metió en más aprietos al Inter, que redujo sus llegadas a la portería y al final no pudo evitar que los cambios del Madrid le llevasen a la derrota.

Es lo que tiene este equipo, que cuando se va arriba, al final siempre encuentra el camino. Ese gol que tanto le faltó otros años, ahora aparece.

El Madrid fue ganando enteros porque no se echó tanto hacia atrás. Antes, se vio en un aprieto contra un rival que le exigía mucho mirar a su espalda. Ancelotti ya vio un partido complicado, o eso demostró en el once titular. Dejar fuera a Hazard, cada partido a punto de renacer, y dar paso a Lucas Vázquez antes que, por ejemplo, a Rodrygo es un mensaje de que hay que tomar algunas precauciones. En la segunda mitad, cuando se decidió ir a por el partido, dio paso a Rodrygo y como ocurrió hace un año, fue decisivo. Hace menos ruido que Vinicius, pero con minutos puede ser también un jugador clave.

Lucas volvió, pues, a su posición de extremo, pero lo que mejor se le dio fue robar balones y confundir al rival. Es hábil para eso, aunque luego no estuvo tan hábil para ayudar al ataque.

La mayoría de las veces llegaba el Madrid era porque corría, pero el equipo se partía y Benzema y Vinicius iban solos contra el mundo. O si les acompañaban, el Inter miraba con deseos los huecos que dejaba el rival en las transiciones. Dio, durante la primera parte, la impresión de que los jugadores blancos llegaban un segundo tarde a la fiesta.

El Inter encontró en los balones cruzados un arma para hacer daño. Les costaba defenderlos a Militao y Alaba, centrales ayer, porque, en el primer partido de categoría de la temporada Ancelotti dejó otra pista. Alaba va a ser el central y en la izquierda, ya veremos. Miguel unos días; Nacho para los momentos serios y se supone que Mendy cuando se recupere. Marcelo será el punto de fricción algunos días y en otros, no se hablará de él.

Sufría el Madrid en los balones al área y también al sacar la pelota jugada. Por eso le pedía Casemiro a Courtosis que diese un pelotazo sin miedo cuando fuera necesario. Pero pasó la tormenta y el Madrid dio un paso adelante. Necesita que los del centro del campo estén finos para que el equipo no se rompa. No lo estuvieron al comenzar y sí al acabar el partido. Tuvo más físico el Madrid que el Inter y un banquillo más resolutivo para empezar bien la Champions.