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Bryan desmonta al Barcelona en Granada (2-2)
El joven talento del Granada destroza al campeón, que sólo empata al final de un partido que acabó con dos acciones polémicas, una para cada equipo. Histórico Lamine Yamal, el más joven en marcar en Liga: 16 años y 87 días
La teoría y la práctica del fútbol. Xavi antes del partido contra el Granada: "Cuidado con las pérdidas". Paco López: robar, salir y aprovechar las ocasiones. A los 17 segundos de partido, pérdida de Gavi que no puede recuperar Gündogan, Gonzalo Villar se la da a Bryan Zaragoza y el tiro cruzado se va a la red. Todo lo hablado por un técnico, a la basura. Todo lo hablado por otro cumplido con pulcritud.
Pero lo mejor del talentoso atacante del Granada estaba por llegar porque la segunda vez que pudo correr dejó su sello. Se adelantó a Koundé, le hizo un primer quiebro con caño, y después, la maravilla: un amago que tiró al suelo a Ter Stegen e hizo perder un poco el equilibrio al defensa francés. Y le siguió el toque de calidad: con el exterior para dentro, pese a que el guardameta pudo levantarse y tocar la pelota. Se está hablando mucho de Bryan, el futbolista que más regatea en Europa. Ahora, al haberlo hecho contra el Barcelona, va a salir en todas las teles y redes sociales. Koundé, por cierto, se lesionó después, para redondear su mala tarde.
En medio de un gol y otro el Barcelona ya se había hecho con el control de la situación, había lanzado media docena de córners y había tenido un par de ocasiones, en las botas de Gavi y Joao Félix, que paró Ferreira. El Granada estaba dispuesto a sufrir. Mordía en cada acción y minimizaba al campeón, que sólo encontró algo de consuelo justo antes del descanso, cuando Lamine Yamal hizo historia al convertirse en el futbolista más joven de siempre en marcar un gol en Liga, con 16 años y 87 días. Fue en una jugada atropellada de Joao Félix; el rechace le llegó al joven canterano, que sólo tuvo que empujarla.
La segunda parte se le podía hacer muy larga al conjunto local, pero continuó reduciendo daños. E incluso en las jugadas a balón parado amenazó, como en un remate de Boyé que se fue fuera por poco. Como es lógico, el Barcelona fue sumando ocasiones. No lo tenía claro, atascado, pero sólo por acumulación de posesión y por jugar tan cerca del área contraria, llegó la oportunidad de Ferran Torres o el tiro de Gündogan. Ferreira estuvo perfecto en todas las pelotas que pasaron, pero no pudo hacer nada en el remate de Sergi Roberto, muy protestado por una posible falta previa de Joao Félix que no pareció existir. Sergi había entrado en la segunda parte. También Oriol Romeu. No tenía muchas más opciones Xavi en el banquillo, con el hospital lleno.
El Barça volvió a jugar en el alambre y esta vez sólo pudo rescatar un punto. Pudo ser ninguno si Bryan hubiera acertado la tercera que tuvo, que fue al palo, ya con 2-2. Joao sí cabeceó con éxito, pero el gol fue anulado por fuera de juego previo, también conflictivo, de esos que hay que interpretar si influye o no, de Ferran Torres.
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