Espanyol
1-0. El Madrid sólo mira a París
Un gol de Gerard Moreno en el minuto 93 da la victoria al Espanyol frente a un rival desdibujado, con muchas rotaciones, apático y muy desordenado al final
Un gol de Gerard Moreno en el minuto 93 da la victoria al Espanyol frente a un rival desdibujado, con muchas rotaciones, apático y muy desordenado al final.
Por la temperatura, el frío que hacía en Barcelona; o por el día, un martes a desmano; o por los cambios que desdibujaron al Real Madrid; o quizá porque la Liga ya es un asunto menor con el PSG ya en el horizonte, el equipo de Zidane nunca entró en calor en su partido contra el Espanyol y perdió en el último minuto, cortando la racha y poniendo límite al optimismo que había estado construyendo durante estos días. El partido fue siempre una incomodidad para el Madrid y es otro tropiezo en la Liga, aunque dio la impresión de que tal como esta la Liga, lo de ayer no duele tanto.
Nunca abandonó las rotaciones Zidane cuando las cosas iban mal y tampoco lo va a hacer ahora. Con Modric y Kroos recuperándose, Casemiro se cayó de la convocatoria por la mañana y sin Cristiano Ronaldo, descansando porque este año el objetivo ya sólo es uno, se presentó el Madrid en el campo del Espanyol con Bale e Isco como delanteros y con Kovacic y Marcos Llorente como conductores del juego. Es decir, que salió un partido monótono y con muy poco remate. Dominó el conjunto de Zidane, sobre todo en la primera parte, pero lo hizo de una manera aséptica, sin mancharse y sin herir al Espanyol de Quique Sánchez Flores. Y según pasaban los minutos, fue desapareciendo, como convencido de que el empate tampoco era tan malo. Y ni siquiera la derrota va a generar problemas. Su negocio ya está en otro sitio.
Como contra el Barcelona, el plan de los locales era mantenerse ordenados atrás para no permitir ni un hueco al rival hasta matarle de aburrimiento. Durante media hora, el Madrid movió la pelota de un lado a otro, pero sin encontrar el ritmo adecuado. Los jugadores de arriba se movían mucho, sobre todo Asensio, que empezó de extremo izquierdo, pero que tan pronto se juntaba con Lucas Vázquez por su lado, como aparecía como delantero. Dejó algunos detalles sensaciones el joven futbolista, pero, como el resto del equipo, al final no concretó en nada. Tuvo voluntad el Madrid, pero le faltó claridad. Fue un equipo plano. Asensio tuvo detalles, pero nadie más en el centro del campo imaginó algo para salir de la rutina de un martes por la tarde-
A Marcos Llorente se le van pasando los trenes. Roba, pero no aporta nada diferencial. Kovacic le pone picante con sus carreras en vertical, aunque le falta visión general del fútbol. Estaba por ahí Isco, que era el que tenía que elevar el tono del choque. No lo hizo porque no está lúcido en estas fechas y habrá que ver qué decide Zidane para París.
El Real Madrid se fue retirando de la batalla mientras el Espanyol intentaba guerrear. Entró en el partido con una contra a la media hora del choque y fue ganando enteros. Tiene el plan muy claro y ha convertido su campo en una roca para los grandes. El Barça empató y el Atlético perdió como el Madrid. Los minutos jugaron a su favor y los cambios de Quique empujaron al equipo hacia arriba hasta ganar a un equipo con un objetivo muy lejos de allí.