«¡Zinedine, te quiero!»

Las caras en la Puerta 55 del Santiago Bern abéu parecían calcamonías de las de hace una semana después de la goleada frente al Deportivo. Sonrisas amplias, ilusión en la mirada de niños y mayores y gritos, muchos gritos, muchísimos gritos de satisfacción. Señoras y señores: ¡esto es el Real Madrid de Zizou!

- «De 5 en 5»

Dos partidos y dos «manitas» en el marcador local desde que Zinedine tomó las riendas del equipo, goleadas que enorgullecen al socio blanco... ¡y le dan energía extra para todo lo que se avecina! Sobre todo si los seguidores tienen que hacerse unos cuantos kilómetros de vuelta a casa, como es el caso de Lalo y su hijo. «Ahora sí, Nacho, ahora me subo al coche hasta Toledo y todo esto ha merecido mucho la pena. ¿Has visto la cara de felicidad de mi hijo?». Claro que la vi, muy de cerca, era un rostro feliz, casi hipnotizado por su Real Madrid. Entonces, el chaval se arrancó a hablar: «De 5 en 5, desde que está Zidane los marcamos de 5 en 5». Claro que sí, crack... y que dure.

- «Esto es la BBC»

La BBC hizo las delicias del madridismo, los aficionados salían encantados del Bernabéu y todos querían acercarse al micrófono de «El Chiringuito» para hablar maravillas de sus héroes. «Esto me empieza a recordar a la mejor época de los galácticos, qué nivelazo. Esto es la BBC», repetía extasiado un treintañero con la camiseta de Benzema. El clima era de fiesta, espectacular y, claro, llegaron los primeros piques sanos: «Tanta bola a la MSN y darle palos a la BBC...¿Y ahora qué? Si llevan bastantes más goles que los tres del Barcelona». Cierto, amigo mío. Ahora a esperar que lo de Bale y Benzema se quede en un simple susto.

- «Zinedine, te quiero»

Al ver tal nivel de entusiasmo en los alrededores del templo blanco entre el personal tuve que preguntar: ¿quién es el culpable de todo esto? Inmediatamente,comenzó un cántico unánime: «Zinedine, Zinedine... Zinedine, te quiero, lolololo... (todo esto al ritmo de la famosa canción «carnaval, carnaval...»). Uno puede imaginarse el desmadre que se vivió después de la goleada al Sporting de Aberlardo, aunque no lo vea. Es una realidad, es ilusión, es alegría, es... lo que ha provocado la llegada de Zinedine Zidane entre el madridismo militante.

- «Tocar madera»

Lo único negativo de ayer fueron las lesiones. Bale y Benzema tuvieron que ser sustituidos antes de tiempo y había cierto clima de preocupación entre el personal en la Puerta 55. «Qué mala pata lo de Bale, otra vez en el gemelo y justo cuando mejor estaba». Una contrariedad sin duda. El último mes del futbolista galés estaba siendo para enmarcar, igual que la temporada de Karim. «Benzema se está hinchando a goles, se está convirtiendo en el nueve que todos queríamos ver. Ahora, a tocar madera y que no sea grave», decía un aficionado. Ojalá lo del francés se quede en un simple susto, compañero.