Griezmann, la cresta de oro del Atlético

Antoine Griezmann le costó al Atlético unos 30 millones de euros, cantidad que a la luz del rendimiento del futbolista francés no es que suene a ganga, pero sí están plenamente amortizados. El exquisito zurdo volvió a hacer doblete en Riazor, suma ya 20 goles en Liga y 23 en el cómputo de todas las competiciones oficiales y, lo que es más importante, se ha convertido en el referente del equipo, en el jugador franquicia del Atlético.

El reto con Simeone

Su primer gol tardó en llegar, le costó acoplarse a la disciplina táctica prusiana de Diego Pablo Simeone a la hora de presionar la salida de la circulación del balón del rival, y por supuesto en el repliegue defensivo. El técnico rojiblanco y él se picaron y el Cholo le retó psicológicamente a que mejorase su espíritu de lucha, amén de acomodarle en una posición lejos de la banda izquierda, como segundo punta por detrás del ariete, como enlace del medio campo con Mandzukic y luego con Torres cuando llegó el «Niño».

EL «CHICO 10»

Pues bien, Griezmann se maneja ahora como pez en el agua por detrás del delantero croata, de Fernando Torres o moviéndose a su aire por todo el flanco del ataque rojiblanco como falso ariete. Le da igual, marca con el uno, con el otro o en solitario. Este chico luce el «7» a su espalda, pero ya es un «10» sobre el terreno de juego. Se soltó la cresta. La cresta de oro del Atlético.