Río de Janeiro

¿Hay relevo para Bolt y Phelps?

Los Juegos han supuesto el adiós de los dos mitos más grandes del deporte olímpico contempóraneo. Ledecky, Simone Biles, el récord de Van Niekerk... a Río lo salvaron los deportistas

Usain Bolt y Michael Phelps
Usain Bolt y Michael Phelpslarazon

Los Juegos han supuesto el adiós de los dos mitos más grandes del deporte olímpico contempóraneo. Ledecky, Simone Biles, el récord de Van Niekerk... a Río lo salvaron los deportistas

Río, unos Juegos desastrosos en cuanto a organización, ha visto las últimas actuaciones de los héroes de las tres últimas citas olímpicas y mucho más.

¿Tiene límite Ledecky?

Con quince años ganó su primera final olímpica en Londres. Con 19 sumó otros tres oros, en 200, 400 y 800 libres, superando en las dos últimas pruebas el récord del mundo. Mirada de niña, caníbal en la piscina, no se sabe dónde están sus límites. Nunca ha perdido una final individual en una prueba internacional. Añadió una plata y un oro más en los relevos.

Van Niekerk, Johnson, Sevilla...

La vuelta al estadio, los 400 metros, distancia emblemática que tenía una plusmarca de una leyenda: Michael Johnson. El surafricano Van Niekerk batió a sus siete rivales y al mito. Desde la calle 8, con una zancada impecable y sin bajar el ritmo en la recta, dejó los 43.18 de Johnson en 43.03. El estadounidense le felicitó, pero poco después estaba andando por Río y no quería hablar del tema.

Bicampeón Murray

El tenis sufrió problemas con los horarios y con el tiempo. Hubo apreturas en el calendario y, en la pista dura de Río, el mismo vencedor que hace cuatro años en la hierba de Wimbledon. Es el primer tenista con dos oros en el cuadro individual.

Neymar rompe una maldición

Veinte minutos estuvo llorando Neymar. Pero era de alegría. Él marcó el último penalti en la final ante Alemania que rompía la leyenda negra de Brasil en los Juegos. Habían perdido las tres finales disputadas. A la cuarta, oro. Y Maracaná fue una fiesta.

Biles, la hormiga atómica

Se propuso conquistar cinco oros en gimnasia, algo que nadie había conseguido, y se tuvo que «conformar» con cuatro y un bronce, con lo que igualó a Latynina. Simone Biles es la revolución.

El color no importa

Ganadora de los 100 libres, es la primera mujer negra medallista de oro en natación. Rompió moldes, como Schippers en los 200 metros, aunque ella se tuvo que conformar con la plata. Demostraron que los negros y las negras saben nadar y los blancos y las blancas pueden correr rápido.

La fiesta del voley playa

Si Río puede presumir de algo es de los partidos de voley playa en Copacabana, donde nació este deporte. Caipirinhas, música y buen ambiente hasta la madrugada mientras los deportistas saltaban y golpeaban la pelota.

Piscina de agua verde

Inolvidable fue el incidente en la piscina de saltos de trampolín. De repente, estaba verde. De repente, olía mal y tardaron días en descubrir que había sido por culpa de un químico que habían utilizado y que anuló el cloro del agua.

Kaori Icho, la mujer de oro

De Atenas a Río, desde los 20 años a los 32 que tiene ahora, la luchadora libre Kaori Icho ha sido invencible en unos Juegos. Cuatro participaciones, cuatro oros. Ninguna mujer ha logrado algo así. En hombres, sólo lo han conseguido cinco deportistas. La japonesa estuvo 13 años invicta.

Medalla a la solidaridad

La neozelandesa Hamblin tropezó en las series de 5.000 y se llevó por delante a la estadounidense D’Agostino. En lugar de recriminarse nada, se ayudaron una a la otra y la «kiwi», que salió mejor parada, esperó y a animó a la americana, que tenía la rodilla tocada. Se fundieron en un abrazo y pusieron al público en pie.

Equipo de refugiados

El equipo de refugiados, formado por diez deportistas de atletismo, natación y judo, participó en los Juegos bajo la bandera olímpica. Corrieron, nadaron y pelearon por ellos y por los miles y miles de personas que están en su situación. Fueron de los más aplaudidos en la ceremonia inaugural.

Leyendas

El equipo estadounidense femenino de baloncesto conquistó su sexto oro consecutivo. El masculino, el tercero. Son los mejores. En balonmano, Dinamarca puso fin al reinado de la Francia de Karabatic, que se había impuesto en Pekín y en Londres.

Carolina Marín vence a Asia

Lo de la onubense traspasa las fronteras de España. La prueba femenina individual de bádminton siempre la había ganado una jugadora asiática. Ha llegado ella para establecer una dictadura: a sus dos Mundiales ha sumado un oro olímpico.

Bolt: más humano, también es el mejor

Usain Bolt se presentó en Río con alguna duda por una lesión que tuvo un mes antes. Eso y la edad hacen que ya no sea tan rápido como antes, pero aún así es el mejor con diferencia. Es complicado ya que supere sus récords del mundo de 100 y 200, lo que no ha impedido que se llevara el oro en las dos distancias con relativa facilidad. También se impuso en el relevo. Tres de tres, como en Londres y como en Pekín. El relámpago corrió por última vez en unos Juegos. Se buscan nuevos ídolos.

Phelps: el adiós del rey de los juegos

Michael Phelps volvió a ponerse el bañador tras caer en el infierno del alcohol y la depresión. Se preparó a conciencia para Río, para tener el adiós que él deseaba. Con 31 años, sumó otras seis medallas a su colección, cinco de oro y una de plata. El singapurés Joseph Schooling podrá presumir de que le ganó su última carrera individual, los 100 mariposa. Phelps pasa ahora a ser una persona normal. Eso sí, con 28 medallas olímpicas. ¿Alguien se atreve a intentar superarlo?