Baloncesto

Rudy Fernández

«No ganar el bronce sería jodido»

Los jugadores españoles intentaban sobreponerse a la derrota y pensar ya en el partido ante Australia por el tercer puesto

Rudy Fernández no podía ocultar la decepción por la derrota frente a Estados Unidos. Pau Gasol estaba decepcionado y algo dolorido, pero también con ganas de jugar el último choque. Nikola Mirotic estaba decepcionado y algo dolorido, pero también con ganas de jugar el último choque
Rudy Fernández no podía ocultar la decepción por la derrota frente a Estados Unidos. Pau Gasol estaba decepcionado y algo dolorido, pero también con ganas de jugar el último choque. Nikola Mirotic estaba decepcionado y algo dolorido, pero también con ganas de jugar el último choquelarazon

Tristeza comedida en el equipo español. Perder duele. Hacerlo contra el mismo equipo por cuartos Juegos consecutivos fastidia. Pero si ese equipo es Estados Unidos, quizá el dolor sea menor. El «estamos jodidos» lo repitieron todos. El mismo verbo utilizó Juan Carlos Navarro para otra cosa: «Sería jodido que nos fuéramos sin medalla. Creo que lo merecemos», dijo el escolta del Barcelona, que de momento no quiere pensar en si será su último partido con España, el último partido de una generación. Ese tema no se contestó ayer. «Ya veremos cuando acabe la temporada», explicó Pau Gasol, que levantó tanta o más expectación que los jugadores estadounidenses. Había hasta quinta y sexta fila para escuchar sus palabras. Una marabunta.

En el corrillo le preguntaron si volvería a unos Juegos. «Los siguientes serían con 40 y llevo muchos partidos y mucho compromiso. También he tenido vivencias inolvidables que me gustaría seguir teniendo, pero en el siguiente campeonato decidiré, porque las cosas pueden cambiar muy rápido», aseguró. Pau se lamentó porque, para él, esta vez es la que sentía con más determinación que podían imponerse al poder de la NBA. «Es una lástima, hemos cometido más errores de los habituales contra ellos. Me parecían más ganables que nunca», afirmó.

Las dificultades que encontró el equipo nacional fueron más allá del talento que tienen los estadounidenses. «Te sacan muchos kilos, hemos tenido problemas en el rebote y a la mínima que te despistas te hacen mucho daño», opinaba Navarro, que se saludó con Carmelo Anthony en los intestinos del Arena Carioca 1. «Son grandes atletas. Hemos hecho un buen trabajo atrás y hemos reducido su porcentaje de acierto, pero ellos también han reducido el nuestro con su físico. Nos ha costado mucho atacar. Son seis tapones contra uno, intimidación...», era la reflexión de Scariolo, que considera que este equipo estadounidense, defensivamente, es el mejor que han tenido nunca. «Y además han venido para jugar. Estaban muy metidos en el partido», continuó el técnico. También recordó que España se puso como objetivo en Río conquistar una medalla. «Todavía podemos hacerlo. Sería algo histórico y vamos a competir con las ideas claras».

A esa batalla se apuntará Pau. «Está dolorido, pero como siempre apretará los dientes y querrá recuperarse», siguió Scariolo. «El gemelo está dolorido, pero espero que no empeore para poder estar a un buen nivel en el tercer y cuarto puesto. He jugado todo lo fuerte e intenso que he podido, aunque no me sentí al cien por cien», decía el protagonista.

«Sabemos cómo reponernos», decía Felipe Reyes. La recuperación tiene que ser mental y física, porque el duelo de ayer fue muy duro, de mucho contacto. «Para nosotros es una final y estamos mentalizados para ganar la medalla, que sería muy importante», iba en la misma dirección Sergio Rodríguez. Lo mismo que Navarro: «En 36 horas tenemos que levantarnos. Tenemos que reconstruir el equipo y jugar de la forma que nos ha llevado hasta aquí». También Gasol: «Es una medalla olímpica y tenemos que recuperarnos rápido para luchar por ella». Felipe no quiso escudarse en el arbitraje: «Sería de cobardes». Eso sí, admitió que nunca en su vida había tenido «un partido con tantas técnicas». «Jamás me había pasado, pero los árbitros nos han dicho que era culpa nuestra, que si queríamos, seguirían así. Pero no han influido en nada», completó Navarro.

Estados Unidos ya es pasado. «Ésta es una derrota que nos puede dar fuerzas y ayudarnos para luchar por el bronce. Hemos dado un paso para acabar bien».

Ahora sólo cabe pensar en superar a Australia por el bronce, tras caer los «aussies» 61-87 ante Serbia, que se jugará el oro ante Estados Unidos.