Natación

Adiós, Phelps

El estadounidense nadó en competición por última vez y se impuso en el relevo 4x100 estilos. Su legado: 28 medallas olímpicas, 23 de oro, tres de plata y dos de bronce

Phelps saluda desde su último podio, durante la entrega de la medalla de oro de 4x100 estilos
Phelps saluda desde su último podio, durante la entrega de la medalla de oro de 4x100 estiloslarazon

El estadounidense nadó en competición por última vez y se impuso en el relevo 4x100 estilos. Su legado: 28 medallas olímpicas, 23 de oro, tres de plata y dos de bronce

Esta vez sí, según reconoce él mismo, Michael Phelps ya es historia en la natación. El relevo de 4x100 estilos que nadó en Río, haciendo el tramo de la mariposa, su gran especialidad, fue su última carrera en competición. Se marcha, cómo no, con una nueva medalla de oro olímpica, la vigésimo tercera en su palmarés, a las que suma tres platas y dos bronces. Difícil que se repita un nadador así, con su perfección en el agua y también sus imperfecciones fuera. En los periodos entre Juegos Olímpicos le han pillado dos veces conduciendo borracho y una fumando marihuana, pero en la piscina siempre encontró la salvación. Phelps hizo historia con su quinto puesto, a los quince años, en Sidney 2000, se quedó cerca de la proeza de los ocho oros en unos mismos Juegos en Atenas 2004 (sumó seis, más dos bronces), consiguió la hazaña en Pekín 2008 y tuvo una primera retirada en Londres 2012. Pero las apariencias engañaron. Allí parecía que se marchaba decidido y contento, pero no. Sin la competición entró en un periodo de dificultades que dieron son sus huesos en una clínica de rehabilitación por sus problemas con el alcohol. La idea de pelear por ir a Río resucitó al nadador y a la persona, aparte de la reconciliación con su padre, que se separó de su madre cuando él tenía diez años. Más estable, más responsable, padre desde hace tres meses de Boomer Robert y comprometido con Nicole Johnson, con quien se casará en breve, ha llegado el momento. «Esta vez estoy preparado para retirarme», asegura él.

En su última día fue aclamado como siempre en el Estadio Acuático de Río y fue el más rápido, con mucha diferencia, en sus 100 metros de mariposa. Su compañero Ryan Murphy comenzó bien con la espalda, Cody Miller perdió terreno en la braza porque tenía como rival al británico Peaty, Phelps recuperó el primer puesto y Nathan Adrian completó la tarea. El mejor nadador de la historia se retira donde debe, en lo más alto del podio.