Baloncesto

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«Preparé mucho este partido»

Mirotic admite que tenía ganas de brillar después de haber fallado ante Brasil

Mirotic, en el partido ante Francia
Mirotic, en el partido ante Francialarazon

Una conversación antes del comienzo del encuentro contra Francia. Scariolo: «Nikola, hay que jugar duro». Mirotic responde: «Tranquilo, lo haré». Lo hizo, y de qué manera, para sacarse una espina que tenía clavada con los Juegos. «Contra Brasil fallé en un rebote y recibí muchas críticas, que eran merecidas. Pero desde ahí he mejorado», explicaba el hombre que destrozó a Francia con sus lanzamientos desde lejos, y también desde cerca. El ala-pívot de los Bulls se convirtió en un francotirador sin apenas errores. Él y la defensa dispararon a España hacia un triunfo más cómodo de lo que se presumía. Sus triples y los tapones de Gasol levantaban el «Ohhh» de un público que estuvo más bien frío. Ni los aficionados franceses y su «Allez les bleus, allez les bleus» («Vamos, azules»), que suelen repetir constantemente, calentaron el choque. Tampoco tenía mucho que celebrar la afición gala. Desde el principio sólo hubo un equipo en la cancha. «Me preparé mucho para este partido, tenía muchas ganas de jugar bien», aseguró Mirotic. «Quizá haya sido mi mejor actuación con la Selección, tanto en ataque como en defensa, porque el triunfo estuvo en la defensa», continuó.

No sólo fue su partido más notable con España. Willy Hernangómez tenía la misma sensación. «Sí, supongo, por el momento, por las circunstancias, por el escenario», reconocía el nuevo pívot de los New York Knicks. «Mi papel es aportar desde el banquillo y dar energía al equipo», aseguró. En un día con poca presencia de Pau en ataque (sólo cinco puntos, y tampoco se obsesionó en buscarse lanzamientos), las canastas en la zona las aportó él. «Me lo he pasado muy bien», admitió. Qué diferente al último duelo que habían jugado en el Eurobasket los mismos oponentes. En aquel, Gasol lo fue todo. Ayer, la estrella de la Selección defendió más que atacó. Taponó e intimidó. «Y nos ha permitido correr», opinaba Sergio Rodríguez. «Ésta es la España a la que todo el mundo está acostumbrada», completó Mirotic, con el sudor resbalando por su barba y con una cara de satisfacción un poco escondida. Esa España que todos esperan apareció justo cuando se necesitaba.

Lo han vuelto a hacer, como tantas otras veces. Cuando se han visto contra las cuerdas, ha salido lo mejor de ellos, para dar una tunda a Lituania, Argentina y Francia y plantarse de nuevo en la lucha por las medallas. «Parece que nos gusta estar así contra las cuerdas», indicó Nikola, el jugador del partido. «Pero cuando llegan los momentos complicados, estamos unidos y todos sabemos lo que tenemos que hacer», añadió. «Se demuestra que somos ambiciosos y que para nada damos las cosas por perdidas», dijo el novato Hernangómez. «En los partidos a vida o muerte nos crecemos. Somos muy competitivos», afirmó Reyes. «Tenemos que crecer a medida que avanzan los días», fue la explicación de Sergio Rodríguez. Pau Gasol pasaba sin decir nada, y Calderón resoplaba y gritaba al entrar al vestuario. La tarea que tienen ahora por delante es la más complicada posible.