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Hulk Hogan

El lado oscuro de Hulk Hogan: escándalos, racismo y la caída del mito americano

De héroe nacional a figura polémica, el legado de Hogan se vio empañado por acusaciones de racismo, escándalos sexuales y el uso prolongado de esteroides

Durante décadas, Hulk Hogan fue el rostro más reconocible de la lucha libre profesional. Con su físico imponente, su icónico bigote rubio y su lema “di tus oraciones y toma tus vitaminas”, encarnó el ideal del héroe americano. Sin embargo, detrás del personaje de ficción, Terry Bollea, su nombre real, acumuló una serie de controversias que terminaron por erosionar su imagen pública.

En 2015, una grabación privada publicada porThe National Enquirer reveló comentarios racistas de Hogan sobre el novio afroamericano de su hija Brooke. En el audio, se le escucha utilizar insultos raciales y afirmar que “todos somos un poco racistas”. La WWE reaccionó con contundencia: lo expulsó del Salón de la Fama y eliminó toda referencia a él en sus plataformas digitales. Aunque Hogan pidió disculpas, el daño reputacional fue profundo. Su reincorporación en 2020 fue recibida con división entre los aficionados.

En 2024, la influencer Essence Jenai acusó públicamente a Hogan de haberla despedido como embajadora de su bebida “Real American Beer” tras descubrir que era negra. El caso reavivó las acusaciones de racismo y generó un nuevo debate sobre su figura pública, ya marcada por episodios anteriores.

Los escándalos raciales no fueron los únicos que marcaron su trayectoria. En 2012, Hogan ganó una demanda multimillonaria contra Gawker Media por la publicación de un video sexual grabado sin su consentimiento. Aunque el tribunal le otorgó más de 30 millones de dólares, el episodio afectó gravemente su imagen pública y lo expuso a un escrutinio mediático implacable.

El gran escándalo de los esteroides de la WWE

Otro episodio controvertido fue su implicación en el escándalo de esteroides que sacudió a la WWE en los años noventa. En 1991, Hogan negó haber abusado de estas sustancias en The Arsenio Hall Show, aunque admitió haberlas usado ocasionalmente. Sin embargo, en el juicio federal contra Vince McMahon en 1994, testificó bajo inmunidad y confesó haber consumido esteroides durante más de una década, incluso compartiéndolos con el presidente de la empresa. Esta contradicción dañó su credibilidad y lo obligó a alejarse temporalmente del mundo del entretenimiento.

En una entrevista reciente con el comediante Theo Von, Hogan reconoció que él y otros luchadores continuaron usando esteroides incluso después de su prohibición, justificándolo como una necesidad médica para tratar lesiones graves. Su físico, antaño símbolo de poder, cambió notablemente en los años posteriores, perdiendo masa muscular y adoptando una apariencia más delgada.

A pesar de todo, Hogan mantuvo una base de seguidores fieles y continuó apareciendo en eventos, aunque su presencia siempre estuvo acompañada de controversia. Su historia es la de un ídolo que ascendió al estrellato global, pero cuya caída estuvo marcada por escándalos que desdibujaron el mito.